
Más de una docena de empresas de telecomunicaciones operan presuntamente en España al margen de la legalidad en el negocio de las líneas M2M (máquina a máquina) a través de tarjetas SIM globales. Según ha podido conocer elEconomista.es de fuentes del sector, se trata de sociedades que realizan actividades propias de los operadores móviles virtuales (OMV), pero ajenas al marco regulatorio español del sector. De hecho, todas las empresas analizadas por elEconomista.es efectúan sus servicios de conectividad para el Internet de las cosas, un negocio de extraordinario potencial de crecimiento. Según estimaciones del sector, estas empresas comercializan cerca de 500.000 líneas en España, con un negocio anual próximo a los 10 millones de euros al año. Entre los usos más habituales destacan la conectividad de contadores inteligentes, vigilancia, ascensores y sistemas de riego automatizados, entre otros.
"Son operadores virtuales o fantasmas que ofrecen sus servicios en España sin aparecer en el censo de operadores de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), como es preceptivo para trabajar en este mercado. Además, su presencia comercial puede representar una competencia desleal ya que tampoco pagan las tasas de numeración telefónica y de operadores de telecomunicaciones, entre otros impuestos. Tampoco cumplen con las obligaciones relacionadas con la portabilidad numérica (cambio de proveedor sin pérdida del número de línea), sin formar parte de las plataformas habilitadas para estas tareas, como la Asociación de Operadores para la Portabilidad Móvil (AOPM)", según señalan a este periódico fuentes conocedoras de la situación.
Riesgo potencial
Entre otras consecuencias, el colectivo empresarial que comercializa con tarjetas SIM globales podría representar un riesgo potencial para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, cuando desempeñen funciones de policía judicial, así como para los funcionarios de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera o el personal del Centro Nacional de Inteligencia en el curso de las investigaciones de seguridad sobre personas o entidades. De hecho, las obligaciones de identificación de las líneas de telefonía queda en una nebulosa al tratarse de información en poder de operadores de cualquier rincón del mundo.
No hay fronteras para estas comunicaciones ya que las tarjetas SIM extranjeras pueden ofrecer conectividad de datos en una o varias redes visitadas de un país, en virtud de acuerdos mayoristas de itinerancia que tenga firmados el titular de dichas tarjetas.
Los servicios de datos mediante tarjetas SIM extranjeras -que técnicamente están en itinerancia permanente en una red visitada- limitan a los operadores domiciliados en la Unión Europea la capacidad para velar por el correcto uso que se hace de sus servicios mayoristas de itinerancia.
Entre las sociedades que presuntamente operan en este negocio y que no aparecen en los registros de operadores de la CNMC se encuentran Matooma, Emnify, Thing mobile, Xuitec, GCA y Getronics, entre otras. La posición de la CNMC es tajante al considerar que el prestador de los servicios M2M/IoT "presta un servicio de reventa de servicio de comunicaciones electrónicas y, por consiguiente, deberá notificar su prestación al Registro de Operadores".
Alguno de estos revendedores de SIM para IoT aseguran gestionar las líneas desde plataformas propias, "diseñadas bajo estándares de máxima fiabilidad y receptividad, trabajando con los mejores servidores y data centers Tier IV Gold
Consulta del regulador
La CNMC ya cursó su respuesta a una consulta sobre este asunto en 2018 para concluir que las tarjetas SIM globales se pueden emplear en tanto en cuanto estas prestaciones de servicios no incumplan la normativa sectorial ni los derechos de los usuarios, aunque limitado a las comunicaciones electrónicas de conectividad de datos en el ámbito nacional. Dicha consulta se interesaba por la necesidad de inscripción en el Registro de Operadores de aquellos proveedores de servicios de M2M o IoT que proporcionan las referidas tarjetas SIM globales.
Otros observadores del mercado consideran que es necesario que la CNMC fije su atención en un segmento del mercado que, o bien requiere de una clara necesidad de regulación o, al menos, que se someta a todos los jugadores a la regulación actual que rige para los operadores móviles virtuales.
Por otra parte, la ausencia de obligación por parte de los operadores de red móvil para ofrecer servicios mayoristas en España para el mercado de tarjetas SIM para el Internet de las cosas pone de manifiesto las deficiencias de la competencia en ese mercado.
¿Por qué Movistar y Vodafone no abren su red mayorista al 'M2M'?
Solo Orange y MásMóvil ofrecen servicios mayoristas en el negocio de Machine to Machine (M2M) en España, una vez que los otros dos operadores de red (Movistar y Vodafone) han declinado prestar este tipo de servicios a terceros. Al tratarse de un negocio desrregulado, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia no puede obligar a Movistar y Vodafone compartir sus redes con otras compañías sin ellas (operadores no virtuales, OMV). No obstante, los dos referidos operadores prestan su conectividad a otras compañías de telecomunicaciones con los que mantengan acuerdo de roaming o itinerancia. De esa forma, numerosos OMV especializados en el Internet de las cosas puede negociar con alguna teleco extranjera para así disponer de conectividad de Movistar y Vodafone para sus tarjetas SIM en suelo español, sin tener que negociar los precios mayoristas con los dos operadores abiertos a ese negocio, los referidos Orange España y MásMóvil.