PEKÍN (Reuters) - El Partido Comunista de China está en peligro a menos que el Gobierno dé pasos más firmes para frenar las opiniones vertidas en Internet por enemigos políticos cada vez más organizados, advirtió un equipo de escritores del partido en un comentario el viernes.
El largo comentario publicado en la edición extranjera del Diario del Pueblo, el principal periódico del Partido Comunista, se suma a las muestras de que Pekín, presionada por la creciente audiencia e influencia de microblogs como Twitter, está sopesando nuevas formas de controlar y canalizar las opiniones online.
Las autoridades chinas se han quejado recientemente de la expansión de "rumores" dañinos e infundados en Internet. Pero estas palabras echaron leña al fuego político al argumentar que detractores subversivos y organizados están explotando la lenta regulación para encender el debate y difundir sus puntos de vista.
Los comentarios instaron a cambios en la forma en que China controla las innovaciones en Internet.
"Las opiniones en Internet son espontáneas, pero dan muestras cada vez más de que se están volviendo organizadas", dijo el comentario, escrito por un equipo de escritores de la principal publicación teórica del Partido Comunista, llamada "Qiushi", que significa "Buscando la verdad".
"Entre las muchas controversias fomentadas en Internet, muchas están organizadas, con objetivos y planificación meticulosa, y algunas tienen claramente intereses comerciales o intenciones políticas de fondo", dijo el comentario.
"A menos que la administración sea vigorosa, las fuerzas delictivas, las fuerzas hostiles, las organizaciones terroristas y otras podrían manipular el sentimiento público fabricando opiniones falsas en Internet, dañando la estabilidad social y la seguridad nacional".
Un comentario del Diario del Pueblo no conlleva un pronunciamiento de la política gubernamental, y además éste podría reflejar una corriente más conservadora en el debate oficial. Pero se suma a las muestras de que Pekín está dispuesto a endurecer los controles.
China tiene importantes filtros en Internet, y bloquear páginas extranjeras populares como Facebook, YouTube y Twitter.
El comentario en el Diario del Pueblo no se refirió exclusivamente al crecimiento explosivo de usuarios de microblogs, o "weibo", que alcanzaron los 195 millones a finales de junio, un incremento del 209 por ciento respecto al número de finales de 2010
Sin embargo, un prefacio al comentario del periódico se refirió al reciente revuelo que se ha extendido a través de los microblogs, especialmente el sitio "Weibo" de Sina, que domina el sector en China.
Entre ellos figuran un accidente de tren en julio que desató críticas contra el Gobierno por los comunicados evasivos, los fallos de seguridad y la febril expansión de la alta velocidad ferroviaria.
Sina y otros operadores de microblogs chinos ya tienen técnicos y software para controlar el contenido, y bloquear y retirar comentarios considerados inaceptables, especialmente sobre protestas, escándalos y líderes del partido. Pero el torrente de información y los puntos de vista combativos pueden ser difíciles de controlar.
"En las batallas en Internet, los comentarios habitualmente negativos aplastan a los positivos", dijo el Diario del Pueblo, añadiendo que las opiniones extremas online estaban llenos de "sospecha constante frente a las políticas gubernamentales, los comunicados oficiales, los puntos de vista mayoritarios, la élite social y los ricos".
Oficialmente, al menos, Weibo, de Sina, y otros microblogs chinos están aún en modo de prueba.
En los comentarios que parecieron destinados a tales microblogs, el texto del Diario del Pueblo dijo que el Gobierno chino se había perjudicado al permitir despegar a tales tecnologías y conseguir muchos seguidores antes de que esté en marcha un control eficaz.
Eso debe cambiarse, dijo.
"Hemos fallado al no tener lo suficientemente en cuenta qué parte de Internet es una espada de doble filo, y tenemos un problema al permitir avanzar la tecnología mientras la administración y la regulación quedan rezagadas", dijo el comentario.
Una vez que el Gobierno intenta controlar una tecnología de Internet que ya se ha vuelto popular, afronta "una aguerrida resistencia y una reacción violenta" de los usuarios, y también las críticas internacionales, dijo el periódico.
"Claramente, en el futuro cuando se desarrollen y aplican nuevas tecnologías de Internet, debe haber primero una amplia evaluación, adoptando políticas incluso más prudentes y mejorando la previsión en administración", dijo.