Ha llegado el momento de reabrir la actividad en las tareas de adaptación del Segundo Dividendo Digital. Eso incluye la desescalada en los trabajos de migración de frecuencias radioeléctricas, ahora en poder de los operadores de Televisión Digital Terrestre (TDT) y en los próximos meses en manos de las compañías de telecomunicaciones. En ese empeño, el Gobierno ha realizado los ajustes en las actuaciones del Estado de Alarma para impulsar la vuelta a la normalidad en la resintonización de las antenas y de los canales de la Televisión Digital Terrestre. Ese movimiento también favorecerá el uso masivo de la telefonía 5G, a través de las frecuencias de 700 MHz. Poco a poco, todo vuelve a su cauce.
La Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales reconoce a través de un comunicado "que ha venido analizando las diferentes actuaciones previstas en del Real Decreto de 14 de marzo" y ha decidido introducir ajustes en las actuaciones planificadas. Con motivo de la referida declaración del estado de alarma, el conjunto del país suspendió las actuaciones de cambios directos de canal de frecuencia para que no se viera afectada la recepción del servicio de televisión por los ciudadanos, además de evitar la realización de resintonizaciones en los televisores, "a fin de no ocasionar traslados de personas en visita a los domicilios". Igualmente se mantuvo, en la medida de lo posible, la planificación de actuaciones del proceso de liberación del Segundo Dividendo Digital y las actividades de cada uno de los agentes, y en particular la actividad de las empresas instaladoras. Por ese motivo, el Ejecutivo decidió mantener las emisiones en simulcast que se venían realizando y prolongar el encendido de los centros emisores de simulcast de tres meses, previstos para 1 de abril de 2020.
De la misma forma se "estableció la prohibición de retirar de las cabeceras de las instalaciones colectivas de recepción de TV, los canales radioeléctricos que se abandonaban como consecuencia del proceso 2DD, debiendo quedar ambos en servicio". Asimismo, se comunicó a la Comisión Europea "la necesidad de aplazar la fecha final del 30 de junio de 2020, para completar la liberación del segundo dividendo digital".
Excepto la prolongación del plazo de la migración definitiva de frecuencias -cuya fecha aún está por decidir de forma consensuada con la Unión Europea-, todas las anteriores limitaciones pueden ahora quedar sin efecto para iniciar la vuelta a la normalidad una vez que "la situación sanitaria ha evolucionado favorablemente, y las diferentes áreas geográficas del territorio nacional están avanzando en el proceso de desescalada".
Por todo lo anterior, la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales considera que "es posible avanzar también en la normalización del proceso de liberación del Segundo Dividendo Digital, de forma acompasada a la evolución de la situación sanitaria".
Por lo pronto, el Gobierno introduce ajustes en las actuaciones planificadas para que las áreas geográficas que se encuentren al menos en la Fase 1 del Plan para la transición hacia una nueva normalidad puedan continuar con las actuaciones de cambios directos de canal. También queda sin efecto la prohibición de retirar de las cabeceras de las instalaciones colectivas de recepción de TV los canales radioeléctricos que se abandonan al incorporar los nuevos que los van a sustituir y se insta a los profesionales instaladores a que adopten las medidas de prevención y contención necesarias para evitar el contagio y la propagación de la COVID-19, tanto de higiene personal como de mantenimiento de distancias mínimas con otras personas. Dichas medidas exigen concertar la cita con carácter previo, mantener una distancia mínima de 2 metros con los clientes, utilizar la mascarilla y guantes desechables o similares y disponer de soluciones desinfectantes para la limpieza de mandos y botoneras del televisor que sean objeto de manipulación.
En el mismo comunicado, la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales asegura que continuará trabajando, como hasta ahora, con todos los agentes que están colaborando en este proceso, y seguirá adoptando las decisiones que sean precisas, "incluyendo el establecimiento de la nueva fecha límite del proceso, teniendo en cuenta como se desarrollen los acontecimientos, y salvaguardando en todo momento la recepción del servicio de televisión digital terrestre y la salud de los ciudadanos".