
Uno de los próximos grandes objetivo de la industria aeroespacial es la exploración profunda de Marte. Después de que la Mars rover haya comenzado a recorrer la superficie del planeta, la NASA está trabajando en el desarrollo de un robot humanoide autónomo que permita preparar la llegada de una expedición humana alrededor del año 2030.
Ahora, este robot autónomo bautizado como Valkyrie ha demostrado las capacidades que tiene para atravesar una zona de piedras irregulares de forma autónoma. Su paso es lento, pero la máquina demuestra con firmeza las capacidades que tiene y las posibilidades que tendrá en un futuro.
Valkyrie, con más de metro ochenta de estatura y 125 kilos de peso, ha sido diseñado y construido por los ingenieros en el centro espacial Lyndon B. Johnson de Houston (EEUU) de la NASA, aunque algoritmo de control y software de reconocimiento del terreno es obra de IHMC Robotics.
El robot cuenta con un sistema láser de detección del terreno (LiDar, por sus siglas en inglés) que le permiten conocer cómo es la superficie por la que caminará antes de dar cualquier paso. Éste le indica al robot cuáles son las superficies planas en las que puede colocar las patas y en cuáles no.
Más allá de la demostración de su capacidad para moverse de forma autónoma, Valkyrie cuenta con un diseño robusto que le permiten aguantar caídas y condiciones adversas. Y es que los materiales en los que está fabricado para ser resistente a altas temperaturas y ambientes hostiles. Asimismo, es totalmente eléctrico, lo que permite mejorar su condición de robot humanoide autónomo.
La idea de la NASA es que ante una posible llegada del ser humano a Marte, el terreno haya sido acondicionado de forma óptima por varias unidades Valkyrie para hacer más fácil la operativa de investigación en suelo marciano.