
Usar la nostalgia para vender no es nuevo, pero durante los últimos meses se ha hecho especialmente fuerte esta estrategia entre las compañías para estirar las ventas con productos de todo tipo. Desde dulces a moda, la nostalgia triunfa en publicidad, atrae a los clientes, y ahora ha estallado en el sector tecnológico.
El ejemplo más claro se ha visto esta semana durante el Mobile World Congress (MWC) cuando el conglomerado finlandés HMD ha presentado una nueva versión del Nokia 3310, que aunque conserva la serpiente no tiene acceso a otras aplicaciones básicas hoy día como WhatsApp.
Sin embargo, eso no ha importado para atraer a los focos y que la reedición del móvil de hace 17 años se haya consagrado como la estrella de la feria de móvil por encima delante de otros teléfonos de última generación como el Huawei P10 o el LG G6.
El Nokia 3310 no ha sido el único que ha apelado a la nostalgia para atraer focos durante el MWC de Barcelona. En concreto, Samsung aderezó la presentación de sus nuevas tablets con el nuevo dispositivo de Staedtler. La icónica marca de lápices aprovechó el congreso y el 50 aniversario de la marca en España para presentar el Noris Digital for Samsung, un bolígrafo interactivo para sus tabletas.
El Noris Digital cuenta ha sido desarrollado en colaboración con Wacom y funciona igual que los lápices S Pen de Samsung. Sin embargo, el gran atractivo de este dispositivo está en que Staedtler ha replicado el aspecto, peso y dimensiones de su icónico lápiz Noris que muchos españoles han estado usando desde pequeños en sus pupitres escolares.
Videojuegos con historia
Al margen de las novedades del MWC, durante los últimos meses el sector de la tecnología se ha convertido en una fuente recurrente de guiños hacia hitos del pasado, especialmente en el apartado de videojuegos.
El principal exponente ha sido Nintendo, que decidió que 2016 fuese el año de lanzar por un lado al mercado Pokémon Go, el primer videojuego de la compañía para móviles con motivo del 20 aniversario del lanzamiento del videojuego.
Sin embargo, la oda a la nostalgia definitiva por parte de la compañía japonesa llegó en noviembre, cuando Nintendo lanzó al mercado la NES mini, una pequeña consola que incluía los 30 juegos principales de la consola Nintendo Entertainment System lanzada en el año 1983.
La respuesta del mercado a la salida de la NES mini ha sido espectacular, agotando las unidades antes de salir al mercado y provocando listas de espera para poder hacerse con la consola. Un tiempo de espera que todavía hay que sufrir si uno quiere hacerse con la consola, casi en paralelo al lanzamiento de Nintendo Switch, la consola de nueva generación de la compañía.
Del mismo modo que Nintendo ha aprovechado el 20 aniversario de Pokémon para estirar las ventas del videojuego, la desarrolladora Activision ha hecho lo propio con una de las franquicias más queridas por los jugadores que rondan los 30 años: Crash Bandicoot. La vuelta del juego de plataformas ha sido muy rumoreada durante los últimos años pero será finalmente en 2017 cuando el zorro rojo desembarque en consolas.
Nintendo y Activision no han sido las únicas en reeditar videojuegos basados en el componente nostálgico. El gigante Disney anunció en agosto la vuelta de sus juegos clásicos de 16 bits como Aladdin, El Rey Leon y El Libro de la Selva.