Las compañías de inversión vienen recortando personal como consecuencia de unos ingresos menguantes (nuevas regulaciones, bajos tipos de interés y mercados en marejada). Al mismo tiempo, la negociación se va haciendo cada vez más automática. Ambas tendencias hacen predecir a McKinsey que, en el futuro, las máquinas dominarán el mercado financiero.
Lo cierto es que cada vez se necesitan menos personas para dar acceso a los clientes accedan a los sistemas de negociación, ejecutar ventas o monitorizar el riesgo.
"El número total de personas se reducirá y serán necesarias habilidades muy diferentes" a las que se buscan ahora, afirma Jared Moon, principal autor del informe.
Moon señala que las firmas de trading necesitarán más ingenieros informáticos y más matemáticos especializados en big data, y menos operadores, aunque el cambio no ocurrirá de la noche a la mañana.
El informe apunta no sólo a los sistemas cada vez más avanzados como responsables de este cambio, sino también a los desarrollos de inteligencia artificial que permitirán a los ordenadores aprender del entorno, utilizando tecnología de supercomputación como la que ya se aplica para el minado de bitcoins.
