
Además de quedarse sin batería, el otro gran drama de los usuarios de los teléfonos móviles es el cambio que se produce en la navegación cuando se acaba la tarifa de datos contratada y el móvil reduce su velocidad hasta límites desesperantes.
Así, se pasa de ir en Ferrari en 4G a conducir un tractor. Una opción es ampliar los datos contratados de forma puntual, pero también se pueden ir haciendo ciertas cosas que optimizan el consumo de datos para retrasar al máximo ese momento. Así, desde Portaltic recogen algunos consejos de cómo manejar el consumo de datos en tu teléfono.
- Las actualizaciones, sólo con WiFi: Los sistemas operativos tienen la opción de actualizar automáticamente las aplicaciones en cuanto haya una versión nueva. Esto puede llegar a consumir muchos datos de nuestra tarifa ya que hay apps que tienen versiones nuevas cada semana. Dentro de Google Play y iTunes puede seleccionarse que solo se actualicen cuando nos conectemos a una red WiFi.
- Navegue por versiones móviles: Generalmente son más pobres que la versión de escritorio, pero también consumen menos datos ya que están optimizadas para dispositivos móviles. Tienen menos anuncios y menos imágenes por lo que su consumo es muchísimo menos.
- Precaución con los vídeos: Facebook es una de las aplicaciones más utilizadas por los usuarios de smartphones y también de las que más se actualiza al día. La versión actual de la red social para móviles cuenta con la reproducción automática de vídeos por defecto, algo que consume datos. Para solucionarlo, habrá que ir a la configuración y en el apartado de reproducción automática escoger que sólo se active con un acceso Wifi o directamente que no se reproduzcan por defecto. Asimismo ver vídeos en aplicaciones como Youtube es una de las acciones que más datos de la tarifa consumen. Si no es muy urgente, tenga paciencia. Viendo unos 20 vídeos en este canal se le puede llegar a ir hasta 1 GB de su tarifa.
- Apps de gestión de datos. La más famosa es Onavo. Pueden resultar efectivas pero si las usamos debemos de ser conscientes que todo el flujo de datos de nuestro teléfono pasará por los servidores de esa empresa, quedando toda nuestra privacidad al desnudo.
- Uso de navegadores especializados: Si se navega estamos constantemente descargando datos, especialmente en las páginas con muchas fotografías. Hay navegadores que comprimen los datos consiguiendo de esta manera reducir el consumo. Es el caso de Chrome (ir a ajustes y seleccionar 'reducir consumo de datos') y Opera, con su modo Opera Todoterreno.
- Control de las notifciaciones push: Una sola notificación consume muy poquitos datos. Pero a lo largo del día pueden llegar cientos de notificaciones, especialmente si usamos aplicaciones de mensajería instantánea. Lo ideal es configurar para que aparezcan solo las notificaciones que necesita.
- Control en los archivos de WhatsApp: Hay usuarios que parecen 'especialistas' en mandar fotografías, memes y vídeos por WhatsApp. Si se tiene el teléfono configurado para que estos envíos se descarguen automáticamente se está perdiendo muchos datos sin haber decidido si queremos realizar dichas descargas. Bastará con ir a ajustes en la aplicación y configurar esta descargar automática.
- Configure y cierre aplicaciones: Algunas de nuestras apps están constantemente usando datos del teléfono móvil ya que actualizan datos en tiempo real. Es el caso de las aplicaciones de metereología o redes sociales. Puedes configurarse para que sólo hagan estas funciones con WiFi, o para que no lo hagan. Asimismo cierre las aplicaciones que ya no esté usando para evitar que se actualicen aunque no se estén mostrando.
- Gestión del uso de la nube: Uno de los grandes inventos de los últimos años es el almacenamiento de datos en la nube. Pero puede ser perjudicial si cada vez que se hace una fotografía o se descarga un archivo el teléfono lo envía al servidor de Dropbox o similares. Como los anteriores consejos, lo mejor es que solo lo haga cuando se conecte a una WiFi.
- Pida el WiFi en la cafetería: No tenga vergüenza en pedir la clave de la red inalámbrica si va a un restaurante o cafetería. Son muchos los establecimientos que disponen de este servicio aunque no esté anunciado. Siempre que pueda, conecta tu dispositivo a una red Wifi. Al final de mes sus datos se lo agradecerán, eso sí, sea consciente del riesgo que puede conllevar.