El mercado de las impresoras 3D, las máquinas capaces de construir casi cualquier cosa a partir de un diseño de ordenador, está que arde. La última en sumarse a la feroz competencia en torno al electrodoméstico del futuro es una compañía británica que promete multiplicar por 12 la velocidad de impresión.
La impresión en tres dimensiones se hace en realidad apilando finísimas capas de un material plástico, una sobre otra, hasta construir en modelo completo.
El proceso suele durar varias horas y las impresoras 3D de primera generación utilizan material de un solo color, lo que da como resultado objetos monocromos que hay que pintar después, informa The Inquirer.
Y ahí es donde la ProDesk3D de botObjects es donde destaca, ya que promete que los objetos se fabrican en cuestión de minutos, y además permite utilizar los cuatro colores clásicos (cian, magenta, amarillo y negro), además del color blanco, y plástico de soporte para la estructura del objeto que no
Su fabricante asegura que se trata de un modelo dirigido tanto al sector profesional (como, por ejemplo, un estudio de arquitectura) como a los particulares, aunque su precio sigue sin estar al alcance de todos los bolsillos: algo menos de 4.000 euros.
La tecnología de impresión 3D está llamada a revolucionar prácticamente todos los procesos industriales, y ya se han desarrollado aplicaciones en rangos tan diversos como la construcción, con una empresa china que "imprime" casas, o la medicina, con el desarrollo de prótesis craneales impresas.
Casas que se imprimen