
Todo listo en el circuito de Jerez para que arranque el fin de semana más motero. El Gran Premio de España-Estrella Galicia se disputará en el trazado gaditano con los hermanos Márquez liderando el campeonato y con Bagnaia en tercer lugar. Tanto Marc como el tricampeón del mundo italiano comparten espacio en el equipo Ducati Lenovo de Moto GP, la categoría reina. Tras una visita a su garaje en el circuito de Jerez, empezamos a pensar que quizá no todo dependa de la pericia -indiscutible- de estos pilotos. A esta quinta prueba del mundial llegan los tres primeros con muy pocos puntos de diferencia. Eso hace más interesantes aún las carreras que se disputarán el sábado y el domingo.
Desde que en 2020 empezara la colaboración entre Lenovo y el equipo Ducati, las carreras de Moto GP se han vuelto mucho más tecnológicas. Un ejemplo de ello: cuando recorremos el garaje vemos a tantos mecánicos con herramientas tradicionales como una llave inglesa como con ordenadores y tabletas de Lenovo. Con el tronar de fondo de las motos realizando los últimos entrenamientos, nos explican que cada vehículo lleva 50 sensores para registrar datos de todo tipo: desde la temperatura a los niveles de aceite, pasado por la presión del aire o la suspensión en cada momento de la trazada. Uno de los técnicos corrobora que "por supuesto, la moto es sólo la mitad de la ecuación".
Cuando las motos vuelven al box después de cada entrenamiento o prueba, son conectadas a un ordenador portátil ThinkPad P1 en el que se vuelca toda esa información, que analizan más tarde con los propios pilotos. A partir de ahí, Márquez o Bagnaia pueden comprobar por qué en tal curva sintieron algo extraño o en qué recta pueden apurar aún más la frenada. Esas decisiones basadas en todos esos datos les serán realmente útiles cuando regresen a la pista. Y todo ello no solo tiene sus efectos en la conducción, sino en la parte mecánica y en las distintas configuraciones. Gabriele Conti, director de sistemas electrónicos de Ducati Corse, añade que ese medio centenar de sensores "capturan puntos de datos como la velocidad, la tracción y la temperatura. Examinamos cada carrera de principio a fin y probamos cada nuevo componente exhaustivamente".
Pero ¿hasta qué punto son tan importantes esos datos? Los directores técnicos de Ducati Corse, la división de motocicletas de competición de la marca italiana, se atreven a hablar de una ventaja de 2,5 o 3 segundos por carrera, "lo que se traduce en una diferencia de 300 metros de un piloto a otro". Visto con perspectiva, ese papel cada vez más decisivo de la tecnología es lo que permite en este deporte que año a año se puedan seguir batiendo nuevas marcas, que todavía haya margen para progresar.
Para el análisis de esa información, el equipo Ducati Lenovo dispone de un segundo equipo permanente y estable en su sede en Bolonia, en continua comunicación con el que va viajando por todo el mundo durante el campeonato. También desde allí tienen posibilidad de estudiar el gemelo digital que vienen construyendo en las últimas pruebas de cada trazada. Esto último lo consiguen gracias a un robot que va recorriendo cada curva y recabando información sobre el estado del asfalto, los peraltes… En total, de cada circuito almacenan nada menos que 200GB de información que se gestiona desde estaciones de trabajo Lenovo ThinkStation P360 Ultra. Insisten en que los pilotos actuales necesitan entender cómo se conjugan todas estas variables para hacer esos pequeños ajustes que, en última instancia, marcan la diferencia entre el primer y el segundo puesto.
Andrea Gorfer, diseñador de Electrónica y Sistemas Electrónicos de MotoGP en Ducati Corse, explica que "el combustible enciende el motor, pero los datos conducen la carrera". Gabrielle Conti nos pone un ejemplo bastante evidente al recordarnos que el consumo de combustible varía según la humedad. "De esta manera, si se consume demasiado, no se puede terminar la carrera, pero si, por el contrario, se consume muy poco, entonces no se alcanza la velocidad suficiente". Para dar con el parámetro exacto que hay que aplicar, se sirven del sistema de aprendizaje automático en Lenovo HPC, que se retroalimenta a los ThinkPads que vemos repartidos por todo el box y en manos de los técnicos.
Así, junto a ese talento y valentía de Marc Márquez y Pecco Bagnaia, el equipo Ducati Lenovo ha ido introduciendo otros compañeros de viaje bastante menos visibles pero da la impresión de que son bastante determinantes en el resultado final: desde el aprendizaje automático al gemelo digital, pasando por el Edge-Computing o la analítica de datos. Quizá cuando veamos las carreras este fin de semana entendamos que el camino para subir al podio es bastante más complejo y sofisticado de lo que pudiera parecer desde fuera.