Los resultados de Nvidia publicados esta semana no saciaron el apetito de los inversores por unas cuentas de matrícula de honor. Los problemas del superchip Blackwell, y las elevadísimas expectativas no superadas de los analistas más exigentes, dejaron con hambre al mercado, lo cual se reflejó en las recientes caídas en bolsa de Nvidia, ya corregidas en la presente jornada. Sin embargo, el récord de ingresos evidenció el vigor de la compañía de Jensen Huang, revelando que la IA todavía tiene mucha tela que cortar. Nvidia, Apple y Microsoft, integrantes de las Siete Magníficas, lo saben bien, y por ello están planeando participar en una ronda de financiación de OpenAI que aumentaría considerablemente el valor de la creadora de ChatGPT.
En Silicon Valley no solo están instruidos en informática: también saben que la unión hace la fuerza. Esta semana Nvidia ha negociado la entrada en una ronda de financiación de OpenAI, junto con Apple y Microsoft, que elevaría el valor de la compañía hasta los 100.000 millones de dólares. Al frente de este proceso se sitúa Thrive Capital, compañía que tiene previsto invertir 1.000 millones de dólares. Por su parte, la contribución de Nvidia rondaría los 100 millones de dólares.
La contribución de las tres Magníficas en esta ronda de financiación de la firma de Sam Altman sellaría una triple entente entorno a una compañía que ha servido bien a los intereses del Big Three. Por un lado, Microsoft no solo ha incorporado las herramientas de OpenAI a sus plataformas de IA en Windows y Copilot. También ha destinado 13.000 millones de dólares al desarrollo de la organización, convirtiéndose en el mayor inversor de OpenAI.
Por otro lado, Apple incluyó ChatGPT en su plataforma Apple Intelligence, la cual estará completamente disponible en 2025. Además, el pasado mes de julio, la compañía liderada por Tim Cook rechazó, junto con Microsoft, un puesto como observador en la junta de accionistas. Finalmente, Nvidia fue clave en el desarrollo de OpenAI. En 2016, cuando OpenAI todavía contaba con Elon Musk entre sus filas, la compañía de chips donó a la entonces organización sin ánimo de lucro un superordenador para impulsar su desarrollo.
Más adelante, Nvidia le ha proporcionado avanzados chips para potenciar las herramientas de OpenAI como ChatGPT: este mismo año, Jensen Huang acudió personalmente a las oficinas de la empresa de Sam Altman para entregar el avanzado procesador DGX H200. Un gesto que fue agradecido en Twitter por Greg Brockman, cofundador de OpenAI.
First @NVIDIA DGX H200 in the world, hand-delivered to OpenAI and dedicated by Jensen "to advance AI, computing, and humanity": pic.twitter.com/rEJu7OTNGT
— Greg Brockman (@gdb) April 24, 2024
Estos planes se cuecen a fuego lento después de que la Nvidia haya sido la última de las tres firmas en presentar unos resultados récord. Así, la compañía de Jensen Huang obtuvo 30.000 millones de dólares en ingresos durante el segundo trimestre de su año fiscal, un aumento del 122% interanual que batió las estimaciones del mercado. Además, obtuvo un incremento del 168% interanual de sus beneficios.
Paralelamente, los planes para la entrada de esta triple entente en la ronda de financiación de OpenAI vienen como anillo al dedo para dicha firma. Esta misma semana, Sarah Friar, director financiero de la compañía, envió un mensaje a sus empleados indicando que la marca estaba en búsqueda de nuevas inversiones.