
La empresa Scytl, que llegó a participar en el recuento de las elecciones presidenciales estadounidenses, va a liquidación. La compañía catalana, filial del grupo cotizado Innovative Solutions Ecosystem (ISE) se ha declarado en concurso de acreedores debido a las abultadas pérdidas operativas y la falta de recursos para financiar su operativa diaria. La organización no ha podido levantar cabeza tras el fiasco del escrutinio de las elecciones europeas y municipales de 2019.
Según informó ISE-que tiene la cotización suspendida desde hace meses- en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Scytl presentó este miércoles una solicitud de concurso voluntario de liquidación "dada la imposibilidad de la compañía de hacer frente a sus necesidades corrientes y dar continuidad al negocio".
La demanda se hizo "como consecuencia de las continuas pérdidas operativas y la falta de recursos para financiar su capital circulante, al no haber logrado obtener fuentes de financiación o inversión alternativas", añadió la organización, que asegura estar trabajando para volver a cotizar lo antes posible.
De este modo, la tecnológica catalana surgida de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) vuelve a concurso de acreedores un lustro después. Entonces, la firma cayó en manos del conglomerado irlandés Grenadier Holdings, que la compró a través de ISE, antes conocida como Service Point.
No obstante, los esfuerzos para revitalizar la compañía fueron en vano, como admite la propia ISE en su comunicado, a pesar de haber logrado nuevos contratos en Países Bajos y Canadá.
Y es que la empresa, que llegó a competir con Indra hace una década, todavía arrastra las consecuencias de un 2019 fatídico en el que fue la encargada de vehicular las elecciones de la Cámara de Comercio de Barcelona, que terminaron judicializadas, y las elecciones municipales y europeas, en las que se tardaron días en tener los resultados por los fallos en su página web.
En su pico, hace una década, Scytl llegó a facturar 40 millones de euros y levantar otros 80 millones de fondos de inversión para financiar su crecimiento.