
Con motivo del aniversario del lanzamiento del popular videojuego de anime Sword of Art, han diseñado un casco de Realidad Virtual (RV) que emula uno de los criterios del juego, que consiste en que, si tu puntuación llega a cero, mueres en la vida real.
Todo esto puede ser muy confuso, ¿Cómo es posible que alguien cree un videojuego que te pueda matar? Y mientras esto suena como una locura, hay miles de personas que están encantadas con la idea. No es que estas personas quieran matar a nadie, sino que son grandes seguidores de Sword of Art y este casco de RV es un gran objeto de culto.
El videojuego Sword of Art (SAO) es juego de rol multijugador masivo en línea basado en una adaptación de una serie de nóvelas japonesas escritas por Reki Kawahara. En ellas el autor escribe sobre un videojuego cuya principal regla es que, si tu puntuación llega a cero, mueres en la vida real.
A partir de esta idea tan extrema, Palmer Luckey, fundador y diseñador de Oculus Rift, decidió (después de que miles de personas se lo pidieran) traer de la ficción a la realidad este macabro juego. Bajo el nombre de NerveGear, este equipo de RV ha sido específicamente diseñado para jugar a SAO, aunque como ha asegurado su creador tan solo se trata de un artículo de colección que no será puesto a la venta ni se utilizará para jugar, "Es solo una obra de arte de oficina".
Este casco tiene tres cargas explosivas integradas que gracias a un sensor capaz de detectar cómo vas en la partida, pueden emitir una serie de micro ondas que pueden resultar letales para el ser humano. Lo que llama la atención a los seguidores de este videojuego, es que no puedes fallar si quieres sobrevivir, aunque de nuevo, hay que recalcar que no hay ninguna intención de ponerlo a la venta o de que alguien juegue.
Con el objetivo de darle más épica todavía a este casco de RV, su creador ha dicho que quiere seguir trabajando en este proyecto para poder crear un sistema en el que una vez puesto no se pueda ni quitar ni destruir el casco, al igual que ocurre en SAO. Es poco probable que alguien se anime algún día a probarlo, ya que hay que estar un poco loco para ello, pero esto demuestra los niveles de fanatismo que algunas personas tienen por los videojuegos.