
Desde hace años, y sobre todo con el aumento de personas que juegan diariamente en todas partes del mundo, se tiene un concepto de que los videojuegos son dañinos para la salud mental. Sin embargo, un nuevo estudio ha descubierto que en realidad no son malos, pero tampoco son buenos, realmente no influyen en nuestro bienestar ( por lo menos hasta lo que han descubierto ellos)
Los videojuegos se han convertido en uno de los pasatiempos favoritos de millones de personas, hoy en día apenas importa la edad, género o país, es más que normal que juegue con alguna consola. Por eso cada vez hay más estudios que analizan los efectos de esto sobre las personas, de hecho, este estudio que acaba de publicar The Royal Society es la continuación de uno que hicieron el año pasado.
Ahora, en su nuevo trabajo titulado "Es poco probable que el tiempo dedicado a los videojuegos repercuta en el bienestar" los investigadores realizaron un análisis a los patrones y reacciones de alrededor de 39.000 jugadores que utilizaban alguno de los siguientes títulos: Animal Crossing: News Horizon, Apex Legends, Grand Turismo Sport, The Crew 2, Eve Online y Forza Horizon 4.
Los investigadores tenían acceso directo de los patrones de uso de los jugadores, por lo que tenían la información real de cuánto tiempo pasaban jugando. Para saber cómo afectaban los videojuegos, se utilizaron dos herramientas, la primera analizaba en una escala las experiencias positivas y negativas durante una partida, pidiendo al jugador que señalase cuando estaba contento, triste, enfadado o asustado.
La otra forma era utilizando la escala de autoevaluación de Cantril, que es una escalera en la que las personas tienen que decir en qué peldaño se encuentran siendo lo más arriba la mejor vida posible. A su vez, el estudio analizaba los niveles de satisfacción con los videojuegos, observando cosas como la motivación para jugar al título o la necesidad que tenían de jugar.
El estudio encontró que, realmente las horas que jugabas a un videojuego no influían directamente en tu bienestar, y que tenías que jugar más de 10 horas seguidas para que realmente te afectase. Cabe destacar que el estudio analizo solamente a jugadores de unos pocos determinados juegos, por lo que los efectos de otros títulos sí que podrían cambiar el resultado.
Por lo que todavía se tiene que profundizar más en este estudio para poder estar seguros de que lo que se ha dicho es cierto, se tendrían que analizar muchísimos más juegos de distintos géneros y con distintos jugadores para poder saberlo con certeza.