Lego se ha unido a Epic Games para combinar la experiencia de entretenimiento del primero con los conocimientos y herramientas en el mundo virtual del segundo, para crear el primer espacio del metaverso diseñado específicamente para que jueguen los niños.
Las posibilidades que ofrece el metaverso se hacen cada día más grandes, debido a su constante evolución y actualización cada vez se pueden hacer más cosas en este mundo virtual. Y si se supone que el metaverso es el lugar del futuro, es importante que sea un espacio para todos, incluso para los más pequeños.
Por esa misma razón Epic Games y Lego han unido fuerzas para crear un lugar seguro para que los niños puedan jugar en él. El motivo de la unión es para impulsar los aspectos fuertes de cada compañía con el fin de crear el mejor espacio posible. Por un lado, Lego tiene más de 90 años de experiencia en la creación de juegos para niños además que desde el 2016 impulsó junto a UNICEF la Política de Seguridad Infantil Digital.
Por su parte, Epic Games se ha especializado en la creación de herramientas y mundos virtuales para jugadores y desarrolladores, aunque esto no es lo único ya que, en 2020, la compañía compro SuperAwesome, una compañía especializada en tecnología destinada a niños de menos de 16 años.
"Los niños disfrutan jugando en el mundo digital y en el físico y se mueven sin problemas entre ambos. Creemos que tienen un enorme potencial para desarrollar habilidades para toda la vida como la creatividad, la colaboración y la comunicación a través de las experiencias digitales. Pero tenemos la responsabilidad de hacerlas seguras, inspiradoras y beneficiosas para todos." ha explicado Niels B Christiansen, CEO de LEGO Group.
Este acuerdo se ha realizado basándose en tres principios. El primero se centra en proteger los derechos de los niños a jugar manteniendo la seguridad y su bienestar como prioridad, el segundo se centra en mantener la privacidad de estos niños y por último este acuerdo pretende empoderar a los niños y adultos con herramientas que les den más control sobre su experiencia digital.
El objetivo final es equipar y capacitar a los niños con las herramientas y experiencia que necesitan para que se conviertan en creadores en el mundo digital y sean capaces de crear espacios de juego seguros y positivos.