
El tope de gama de JBL para los jugadores está repleto de funcionalidades, opciones y características adicionales que potencian el sonido y la experiencia.
Esto es importante porque para los jugadores, ya no es suficiente sólo con ofrecer un diseño cómodo y un sonido impactante; de hecho, eso ya es lo básico que deben tener todos los modelos para ser tenidos en cuenta.
Además, en los últimos años estamos viendo cada vez más lanzamientos que incluyen funciones adicionales; a veces es iluminación RGB en conjunción con un diseño llamativo, y otras, son mejoras de audio como el sonido espacial. Estos Quantum One, con un precio de 249 euros, son de los pocos que tienen todos esos añadidos, y más.
Así son los JBL Quantum One
Estamos ante los auriculares gaming más potentes y completos no solo que ofrece JBL, sino cualquier otra marca. Nada más abrir la caja te das cuenta de ello, por la gran cantidad de cables y accesorios que incluyen; básicamente, puedes conectar estos auriculares como quieras, tanto por el jack de audio de 3,5 mm como por USB-C, y eso es un anticipo de lo que te espera cuando los usas. Lo único que echarás en falta es conectividad inalámbrica, pero en ese caso JBL ofrece los Quantum 800.

Pero lo primero que realmente te llamará la atención es el diseño. Estos probablemente son los auriculares más grandes que he probado, son gigantescos y dependiendo de lo grande que sea tu cabeza, llevarlos puestos puede ser algo cómico. Pero lo mejor es que todo ese espacio se ha aprovechado para meter pequeños detalles estéticos que hacen que parezca arrancado de un robot; por no decir nada de la iluminación RGB integrada, completamente personalizable con tres zonas independientes: el logotipo, el anillo alrededor del auricular, y la muesca en la parte frontal. Usando el programa JBL QuantumEngine, podemos variar los efectos y colores usados, o bien optar por algunas de las seis opciones predeterminadas.
Pese a lo grandes que son, la verdad es que los Quantum One no resultan más pesados que unos auriculares convencionales. Creo que la clave está en los materiales usados, plástico en prácticamente todo el conjunto; eso supone que, en la mano, no dan una sensación muy 'premium' precisamente, algo que se extiende a las almohadillas, que aunque son muy cómodas y gruesas, no son agradables al tacto. Aunque estos auriculares no son baratos, lo parecen y no puedo sino marcar eso como algo negativo. A su favor, tengo que decir que la calidad de fabricación está al nivel de otros productos de JBL, y que no notarás ruidos raros como en otros auriculares de plástico.
Tecnología hasta arriba
Es difícil criticar los materiales usados cuando es evidente que es el sacrificio necesario por la ingente cantidad de opciones y tecnología que tienen estos Quantum One. Cualquier función que se te ocurra está presente en estos auriculares, empezando por la cancelación activa de ruido, una tecnología que solemos ver en modelos inalámbricos para móviles, pero que también resulta increíblemente útil en un entorno gaming.

Con la cancelación activa de ruido, las distracciones desaparecen y podemos centrarnos en el juego; los micrófonos integrados capturan el ruido externo y los chips internos aplican cambios al sonido que sale de los 'drivers' para neutralizarlo. El resultado es bueno, y aunque no es la mejor cancelación de ruido que he disfrutado, ha sido suficiente para tapar el tecleo y los ruidos menores, ayudando a concentrarme mejor en mi tarea. Lo peor es que afecta a la calidad de sonido; en mis pruebas, he notado que con la cancelación activada perdía algunos detalles de mis temas favoritos, que volvían a aparecer cuando la desactivaba.
En los propios auriculares tenemos un botón, uno de muchos, dedicado en exclusiva a activar y desactivar la cancelación de ruido, o bien podemos mantenerlo pulsado para activar la función Talkthrough, que reproduce el sonido capturado por los micrófonos permitiendo escuchar nuestro entorno sin necesidad de quitarnos los auriculares.
Otra tecnología que ha ganado mucha atención en los últimos años es el sonido espacial. Los Quantum One son auriculares 7.1 y tienen la tecnología QuantumSphere 360, capaz de reproducir el sonido en 360 grados; esto es algo más que un simple efecto, ya que es necesaria un alto grado de precisión, hasta el punto de que los auriculares vienen con un micrófono especial de calibración para asegurar el mejor resultado. Al activar el sonido espacial, debemos seguir los pasos que indica el programa, metiéndonos el micrófono primero en el oído izquierdo y luego en el derecho; los algoritmos modificarán el sonido para obtener un efecto envolvente real, pero también podemos indicar detalles como el diámetro de la cabeza.

En la práctica, es una sensación extraña pero muy interesante, es como si estuviésemos usando altavoces en vez de unos auriculares, algo llamativo teniendo en cuenta que estos auriculares son cerrados y no deberían dar esa sensación de 'amplitud'. No es revolucionario, ni sustituto de un equipo real, pero aporta algo muy diferente y curioso a nuestra experiencia; eso sí, recomiendo usarlo en videojuegos y no tanto en música, donde el efecto incluso puede llegar a molestar.
Otro detalle curioso es que estos auriculares pueden rastrear el movimiento de tu cabeza. Podemos calibrarlo sólo con pulsar otro de los botones integrados mientras tenemos la cabeza erguida, y a partir de entonces el sonido cambiará de un auricular a otro dependiendo de nuestros movimientos; de nuevo, es un efecto que asemeja el uso de unos altavoces, y es de ese tipo de cosas que amas u odias. Por último, cabe destacar que estos auriculares son compatibles con DTS para disfrutar de nuestras películas como nunca.

Antes he explicado que podemos conectar los auriculares por el conector tradicional de 3,5 mm, o por USB, pero todas estas funcionalidades, incluida la iluminación RGB, están limitadas sólo a esa última conexión; por lo tanto, no las tendremos si conectamos estos auriculares a nuestra consola Xbox o PlayStation, además de nuestro PC o equipo de música con jack de audio. A cambio, siempre que conectemos los auriculares por USB la configuración se mantendrá entre todos nuestros dispositivos.
Además, el propio cable USB tiene otra funcionalidad más, un selector que nos permite variar el volumen del juego y del chat de audio, dando más prioridad a uno o a otro; por ejemplo, si no queremos distracciones de nuestros compañeros de equipo, o si por el contrario los ruidos del juego nos molestan, podemos variar el equilibrio a nuestro gusto. Eso sí, te tienes que acordar de cómo lo dejaste. En mis pruebas, me extrañó que mi reproductor de música sonase tan bajo, hasta que me di cuenta de que tenía que mover el selector a 'juego' al máximo para que sonase como tenía que sonar.
Buen sonido
Los Quantum One siguen siendo unos JBL y por lo tanto, dan la talla en cuestión de sonido; sin embargo, no son los mejores en este apartado, comparados con otras alternativas de la misma marca.
Como esperaba, JBL ha dado prioridad a los graves y a los sonidos más profundos, en un intento de ofrecer un mayor 'impacto' sonoro; eso supone que las explosiones, los disparos y la música electrónica tienen mucha pegada, y si hemos activado el sonido espacial, los sentiremos a nuestro alrededor. En juegos de disparos, es toda una experiencia.

Sin embargo, eso supone que el resto del rango ha quedado algo en segundo plano; en concreto, el rango medio pierde algo de detalle; es algo especialmente notable escuchando música, donde las vocesd no llegan a desaparecer, pero sí que pierden importancia. No recomendaría estos cascos si nuestra prioridad es escuchar música, ya que a este precio encontramos alternativas dignas para audiófilos; pero si vamos a pasar la mayor parte del tiempo jugando o viendo películas, y sólo un poco con música, realmente están a la altura.

Me ha decepcionado mucho más la calidad del micrófono; nuestra voz obtiene un efecto metálico muy desagradable, y los graves se pierden completamente. Me ha molestado porque este es un micrófono de tamaño completo que hay que unir a los auriculares; en efecto, no se puede guardar dentro del auricular pese a lo grande que es este.
Muy completos
Los JBL Quantum One son los auriculares gaming más completos que he probado hasta ahora. Tienen una larga lista de funcionalidades y la última tecnología, y eso los hace destacar frente a otras alternativas 'gaming', que se centran únicamente en el aspecto visual y de diseño.
Para concentrar semejante cantidad de funcionalidades en unos auriculares, es evidente que JBL ha recortado en algunos aspectos, como los materiales usados. A cambio, la implementación de sonido espacial es una de las mejores que he escuchado, y tenemos cosas como el seguimiento de movimiento de la cabeza, que son realmente únicas y especiales. Es algo más que un simple detalle, es algo que cambia enormemente la experiencia.
Con todo, estamos ante una de las principales alternativas en la gama alta de auriculares gaming, una gran opción para disfrutar de nuestros juegos.