
Apple lleva con los mismos teclados de mariposa desde que los introdujo en 2015. Aunque la compañía ha tardado tiempo en admitir que estos tenían un problema, la verdad es que se atascaban o se estropeaban, por lo que se quedaban pulsadas las teclas o, directamente, dejaban de funcionar. En la actualización de 2018, Apple añadió una membrana de silicona en todas las teclas para evitar que el polvo y la suciedad entrasen en el mecanismo, pero el problema no desapareció. Funcionaban tan mal que Apple tuvo que poner un programa específico para reparar teclados.
En noviembre se escucharon rumores de que Apple planeaba lanzar un MacBook Pro de 13 o 14 pulgadas con nuevo teclado de tijera que ya había introducido en su modelo de 16 pulgadas. Este viernes, un analista de Apple, Ming-Chi Kuo, ha confirmado el rumor y al parecer los nuevos MacBook Pro y MacBook Air que se lanzarán en el segundo trimestre de este año tendrán los nuevos teclados.
El motivo del uso de los teclados de mariposa es que permite diseñar teclados un 40% más delgados que el tradicional teclado con mecanismo de tijera, y el grosor de sus portátiles es algo que siempre ha importado a Apple. El año pasado, la marca decidió cambiar el material con el que se fabrican las teclas y los swtich, reemplazando el poliuretano por nailon, lo que evitaría una posible expansión de la tecla por el calor (y su consiguiente mal funcionamiento). Ahora, cambiará directamente el mecanismo.
Además, se espera que Apple aumente el tamaño de la pantalla en su MacBook Pro más pequeña al reducir los biseles, elevándola de 13 pulgadas a 14 pulgadas. Hizo un movimiento similar con el MacBook Pro de 16 pulgadas, aumentando el tamaño de la pantalla de 15 pulgadas. Apple incluso hizo que portátil fuera un poco más grande para acomodar una batería más grande; quizá haga lo mismo con el modelo de 13 pulgadas.
En una nota separada pero relacionada, Kuo no parece creer que la pandemia de coronavirus afectará significativamente la producción de los nuevos MacBooks, sino que espera que la situación con los proveedores mejore significativamente a finales de marzo, lo que ayudará a mantener los productos de Apple en el mercado.