
"Estaba con unos amigos, empezamos a buscar en Spotify una copla de Carnaval y no había nada. Después fuimos a Internet y solo encontrábamos algunos archivos colgados en Megaupload y vídeos en Youtube. Tras analizar los 30 primeros vídeos, vi que tenían unas 30 millones de visitas, el Carnaval interesa, y vi la oportunidad", así relata el joven empresario Daniel Carrasco cómo nació Espoticai.com
Espoticai es una plataforma online de música, parecida a Spotify o Soundcloud, pero centrada exclusivamente en el Carnaval de Cádiz. Al igual que con Spotify, cuenta con una versión gratis y otra premium, que ofrece escuchar las coplas de los grupos sin cuñas publicitarias y desde cualquier dispositivo móvil.
Carrasco, aunque nació en Extremadura, es gaditano de corazón, ya que "a los 15 días de nacer ya estaba en Cádiz". Sin embargo, cree que el ser de fuera "da la oportunidad de poder ver claras las cosas que de cerca igual no ves".
Y es que con la cantidad de visitas que tienen las comparsas y chirigotas en Youtube "vi que había interés en el tema. Yo veo el Carnaval como una industria, hay que estructurarlo, para poder sumar". Carrasco, que además de empresario, se dedica al desarrollo online, se define como un carnavalero medio, pero contó con el apoyo de uno de los referentes del concurso gaditano, José Luis García Cossío, más conocido como el Selu, segundo el año pasado y pregonero del Carnaval en 2010.
"El primer paso lo di cuando tuve la oportunidad de encontrarme con el Selu, le conté la idea un poco por encima y le gustó mucho, después nos tomamos un café y le entusiasmó. Me ayudó para sondear al resto de autores y saber si tenía el visto bueno para poder hacerlo, hubo unanimidad con el proyecto, había que hacerlo", comenta Carrasco. Por ello, se puso manos a la obra y contrató a una empresa para desarrollar la idea e hicimos un plan de negocio.
A menos de una semana de cumplir un año de la beta, ya tiene casi 12.400 usuarios registrados, por encima de las previsiones cuando nacieron, aunque de éstos, sólo 120 son premiums, con lo que "el modelo se sustenta a base de la publicidad". Sin embargo, Carrasco no llega a comprender cómo "los empresarios son un poco reacios a anunciarse, pudiendo hacerlo de forma directa a un público tan definido".
"Lo más dificil es encontrar financiación, hemos contactado con business angel, buscando por todos lados y la cosa está imposible. De momento contamos con financiación propia, de los premiums y la publicidad", comenta el fundador de Espoticai, un handicap difícil de salvar para seguir haciendo mejoras en la plataforma, en definitiva "mantener el servicio entre todos los que nos gusta el Carnaval, y que permite engrandecer la fiesta, porque de Espoticai no se vive".
Desarrollo móvil
"Si la gente está en Internet, hay que ponerlo en Internet", esa frase de Julio Pardo, autor de coros que lleva en el Carnaval desde 1978, fue uno de los puntos que llevó a Daniel Carrasco a darse cuenta de la importancia del desarrollo móvil de Espoticai.
"Ahora mismo somos la única alternativa real online, ya que el tema de las descargas es una cosa caduca, porque ahora todo está en la nube. Para qué lo vas a tener descargado en la memoria de tu móvil, ocupando espacio, si puedes acceder online en cualquier momento en el desde tu ordenador o móvil", pregunta Carrasco.
Para disfrutar de las aplicaciones móviles, tanto para iOS como para Android, hay que ser usuario premium que cuesta 29 euros al año, 2,99 euros al mes o con un SMS de 1,45 euros por tres horas. Asimismo, ser premium quita las limitaciones y la publicidad de la versión normal.
Sin embargo, lo que más importa a Carrasco es que la gente pruebe Espoticai, trastee y vea lo que hay, y si le gusta, que se quede. Por ello, antes incluso de registrarse se puede consultar los grupos que hay dentro, y se puede probar la versión móvil sin coste durante unas horas.
Daniel Carrasco, fundador de la plataforma Espoticai. 'Imagen: Espoticai.com'.
Las redes sociales, el arma
Uno de los aspectos que más destaca Daniel Carrasco de la aventura de Espoticai, es el contacto que recibe con los aficionados al Carnaval a través de las redes sociales, especialmente en Twitter.
"Es nuestra principal fuente de ventas, Twitter se ha convertido en nuestra mejor arma para vender el servicio. Colaboramos, hablamos, nos apoyamos mutuamente, hay un entorno muy amigable. Como a todo el mundo al final le gusta el proyecto, todos nos cubrimos y nos ayudamos, es maravilloso", argumenta Carrasco.
Uno de los siguientes pasos que tiene proyectado, aunque ahora mismo está parado por la falta de fondos, "es la implementación de una parte social, con la que se puedan compartir listas, hacer una función de reproducción aleatoria según gustos, una radio. Falta financiación, no hay ni institucional, ni empresarial, ni de ningún tipo".
Un archivo histórico
Actualmente, la plataforma tiene actualmente 420 agrupaciones, que van desde las que participaron el año pasado hasta las agrupaciones que participaron en 1974, aunque estas no son las grabaciones más antiguas que se encuentran en Espoticai, ya que cuentan con el coro Los Claveles, de 1896. "Tenemos usuarios muy definidos, los puristas y aficionados nuevos. Los primeros agradecen mucho los archivos antiguos que tenemos, mientras que los segundos buscan agrupaciones de 5 a 7 años de antiguedad", comenta Carrasco.
Sin embargo, el fundador recalca la dificultad de que "los coleccionistas dejen sus tesoros. Ahora hemos encontrado discos de vinilos e incluso alguno de pizarra, pero para este no tenemos ahora mismo infraestructura para poderlo llevarlo a la web".
Respecto al tema de los derechos, además de contar con el visto bueno de todos los autores que están en la plataforma, lo gestionan a través de la SGAE, "nosotros pagamos una cuota a la SGAE y ya es ésta quien lo reparte equitativamente entre los autores del carnaval registrados. No podemos utilizar diferente rasero en los aspectos de remuneración a los autores, por lo que decidimos apoyarnos para esto, también, en la SGAE", argumenta Carrasco.
Además con la premisa de "solo sumar al Carnaval", no solo recoge a los grupos que participan en el concurso, sino que también con otras agrupaciones denominadas como callejeras, con las que se pone en contacto para agregar su disco, o bien incluso hacer la propia grabación. Para éstas, "nosotros grabamos el repertorio en el PayPay [un café teatro conocido de la ciudad] para poder subirlo, con lo que acabamos ganando todas las partes. Ellos se llevan una copia en buena calidad en CD, nosotros tenemos los archivos en la plataforma y el local los clientes".
Asimismo, tampoco quiere que Espoticai sea visto en Cádiz como una plataforma contraria a la venta de discos, que hacen algunos grupos o tiendas especializadas, por ello comenzarán a subir las canciones de este año a partir de Marzo "que es cuando El Melli [tienda de discos especializada en Carnaval] nos ha comentado que las ventas empiezan a bajar. Aunque no somos compentecia, vamos a públicos completamente diferenciados", apostilla Daniel Carrasco.
Espoticai es el primer paso
Sin embargo, pese al freno en la financiación de todo tipo, Daniel Carrasco no tira la toalla y cree que el modelo de Espoticai se puede exportar a muchos otros ámbitos.
"Hay música que es suficientemente masiva en público, pero que no tienen hueco en grandes plataformas como Spotify, y las grandes productoras complican el proceso". Por ello, y habiendo aprendido de errores pulidos en Espoticai, Carrasco ha creado DiscoStream con la que quiere seguir filtrando el mercado.
"Nos hemos puesto en contacto con los carnavales de Uruguay y Panamá, pero además tenemos en mente otros estilos de música como Hip-Hop, Flamenco, o Semana Santa. Estamos comercializando un modelo franquicia, con un fijo anual en concepto de financiación del mantenimiento, soporte y el pago de canon a la SGAE", proyecta Carrasco.
Pone de ejemplo la Semana Santa, ya que hay algunas comunidades virtuales de usuarios en Sevilla que cuentan con más de 70.000 usuarios registrados, con lo que podrían ser el próximo paso que Carrasco podría llevar a cabo.