
Décadas atrás, el sueño doméstico de cualquier adolescente consistía en disponer de un televisor en su dormitorio. Sin embargo, esa ambición ha ido perdiendo fuerza no solo por el paso de los años, sino también por la popularización de todo tipo de dispositivos conectados, como smartphones, tabletas, portátiles y consolas.
Lo que era un consumo alternativo de contenidos audiovisuales ahora es la primera fuente de ocio en el hogar, superando incluso al televisor, hasta hace poco considerado el rey del hogar entre los electrodomésticos. Los contenidos de los videoclubs online -como Netflix, HBO o los servicios similares de Movistar, Vodafone y Orange- están disponibles en móviles o tabletas, lo que reduce la tradicional dependencia de la caja tonta.
Tanto los Millennials, como los denominados Baby Boomers y Generación X dedican cada vez más tiempo a sus dispositivos móviles en detrimento de los televisores tradicionales. Según un estudio de CTA, los jóvenes de entre 18 y 35 años dedican más tiempo (el 55%) en visionar contenidos en sus dispositivos móviles que en los televisores (45%). Según datos de Energy Information Administration, en el periodo comprendido entre 2005 y 2009, el 54 y el 56% de los hogares en Estados Unidos disponía de tres o más receptores de televisión.
Sin embargo, tras años de incrementos sostenidos, el número de televisores ha descendido en aquel país hasta una media del 2,3 televisores por hogar, frente a los 2,9 receptores de 2009. De forma global, el mercado de televisores redujo su negocio el 11% en 2016.
En el caso de España, las ventas de televisores se contrajo el año pasado el 3%, según datos de GFK, con un precio medio situado en los 400 euros por receptor. Samsung es líder del mercado con un 40% de las ventas, por delante de LG Electronics, que superó el 32%. Por término medio, cada español prolonga la vida de su televisor durante 10 años, mientras que el tamaño del dispositivo ronda las 40 pulgadas. Globalmente, el tamaño medio del televisor vendido en 2016 fue de 42 pulgadas, frente a las 35 pulgadas que se imponían en 2011.
Momento de renovación
El momento de la renovación solía coincidir con los grandes acontecimientos deportivos, como Mundiales o Juegos Olímpicos, tendencia que ahora pierde fuerza ante la pujanza de promociones como las de Black Friday o Cyber Monday, por ejemplo, según indican fuentes del sector. Pese a la fuerza de los móviles y tabletas, el televisor sigue siendo el producto estrella del mercado global de electrónica de consumo, con casi dos tercios del total del sector.
La proliferación de las ofertas de contenidos en ultra alta definición también animan a las familias a realizar un esfuerzo añadido en la compra del televisor, hacia modelos de gamas medias y altas. Así, este tipo de mercado creció el 7% en 2016, también motivado por la notable mejora en la calidad de la experiencia de usuario. Así, en el segmento de los televisores de más de 1.300 euros, Samsung disfruta de su particular mayoría absoluta con una cuota del 51% en España, según datos de 2016.