Xiaomi ha presentado su último gran teléfono, el Mi Note 2. Un phablet con el que la compañía china apuesta por primera vez por la pantalla curvada y establece un diseño que recuerda poderosamente al retirado Galaxy Note 7 de Samsung. La compañía además ha presentado el Mi Mix, un nuevo concepto cerámico y sin bordes.
Precisamente, al igual que el Huawei Mate 9, el Mi Note 2 llega para ocupar el segmento de phablet de gama alta que ha dejado huérfano el dispositivo de Samsung ya que aúna grandes dimensiones y altas prestaciones.
En concreto, el último dispositivo de la compañía incorpora una pantalla OLED de 5,7 pulgadas curvada con resolución QHD con una proporción que hace que más del 77% de la frontal del teléfono sea pantalla. Esta curvatura en el diseño no sólo se produce en la parte delantera, sino que la compañía también ha implementado -como sucedía en el Note 7- un diseño curvado en la parte trasera para hacer más ergonómico el dispositivo.
En su interior cuenta con un procesador Snapdragon 821, 6 GB de RAM y una capacidad interna de 128 GB para su versión más ambiciosa y una batería de 4.070 de mAh con sistema de carga rápida 3.0. Además, incorpora soporte para LTE global, sensor GPS de alta precisión y completa funcionalidad NFC que permite incorporar pagos móviles de bancos y sistemas cerrados. El dispositivo también estará disponible en otras dos configuraciones, una de 4 GB de RAM y 64 GB de memoria, y otra versión sin LTE global pero de misma capacidad de 6 GB de RAM y 128 GB de memoria.
Con respecto a su cámara, la compañía ha decidido apostar por incorporar el sensor Sony IMX318 de 22,56 megapíxeles en su parte trasera, capaz de grabar vídeos en resolución 4K con estabilización óptica en tiempo real y con los que la compañía promete unos resultados de alta calidad. Por su parte, ha apostado por una cámara de 8 megapíxeles en la parte frontal con autofocus y modo retrato tanto para selfies individuales como para grupos.
El smartphone estará disponible en dos colores, negro piano y plateado glaciar y en tres versiones con tres precios diferenciados. La versión de 4 GB tiene un precio de 380 euros (2.799 yuanes), la versión de 6 GB sin LTE global costará 448 euros (3.299 yuanes) mientras que la versión más exigente y compatible con LTE en todo el mundo costará 475 euros (3.499 yuanes).