El conocido Raspberry Pi tiene un nuevo competidor. Este mini ordenador que, por especificaciones y precio, sirve igual para programar una nevera que para reproducir películas en el salón, se había enfrentado ya con éxito a varios rivales en el segmento del ultra low cost, y ahora es el turno de Orange Pi.
Tras este poco imaginativo nombre está, como en el caso de Raspberry, una placa de 8,5 cm de largo por 5,5 cm de ancho, con lo básico para ejecutar un sistema operativo ligero -preferiblemente GNU/Linux- y conectarse al mundo exterior, por un precio de sólo 15 dólares.
La Orange Pi PC cuenta así con un procesador Broadcom -Allwinner H3- de cuatro núcleos a 1,6 GHz (frente a los 900 MHz del quad-core de la más reciente Raspberry Pi 2 Model B), y un giga de RAM.
Como es habitual en estos micro PCs, el almacenamiento se realiza en una tarjeta Micro SD (no incluida) que puede llegar a los 64 GB, y tampoco cuenta con WiFi incorporado -aunque se puede utilizar el clásico pincho o dongle-.
Si que puede presumir, en cambio, de conexión Ethernet (red por cable) así como tres puertos USB, salida HDMI, conectores convencionales de vídeo y audio, un receptor de infrarrojos y un micrófono.
Incluso sumando los gastos de envío y el coste de la carcasa -unos pocos euros-, Orange Pi se ofrece como una alternativa muy barata para quienes estén pensando en crear su propio reproductor multimedia doméstico, puesto que gracias a su procesador gráfico este micro PC es incluso capaz de reproducir vídeo en resolución 4K.
