Editorial
- 26/06/2013, 11:00
26/06/2013, 11:00
Wed, 26 Jun 2013 11:00:08 +0200
https://s03.s3c.es/imag/_v0/400x53/3/d/7/logo-ee-anv-home-2.png33043
La población española -46.704.314 habitantes- ha descendido en 2013 por primera vez desde 1971, cuando el INE empezó a publicar anualmente las cifras de residentes. En la década anterior a la crisis, la llegada masiva de emigrantes eclipsó el problema demográfico que venía gestándose por la caída de la natalidad. La crisis provocó la huida de trabajadores extranjeros a sus países de origen y un nuevo fenómeno asociado al desempleo: la emigración de los jóvenes españoles mejor preparados ante la falta de perspectivas laborales. Este fenómeno afecta a las pensiones, pero también a la recuperación económica. El Gobierno debe priorizar las soluciones al desempleo juvenil con el apoyo de la UE para frenar la emigración y posibilitar el retorno de los que se fueron.