El pasado 25 de julio, el Banco Central de Rusia aumentó 50 puntos básicos su tipo de interés oficial en respuesta al aumento de la presión geopolítica y el endurecimiento de las sanciones, dos factores que refuerzan la preocupación del Banco con respecto a la inflación. Si bien nosotros ya habíamos advertido de la posibilidad de una subida de 50 puntos básicos este año en nuestra perspectiva de junio, la medida tomada por el Banco Central de Rusia supuso una sorpresa para la mayoría de los analistas, quienes esperaban que los tipos se mantuviesen invariables. (Sin embargo, parece que los mercados locales sí habían descontado una subida). Si las tensiones en Ucrania persisten y el rublo se sigue debilitando, habrá nuevas subidas de los tipos en el segundo semestre.
Por Evghenia Sleptsova.