La escalada del enfrentamiento con Ucrania sigue provocando tensiones en la economía rusa, debido especialmente a la amenaza de un endurecimiento de las sanciones. Dado que el Banco Central de Rusia está manteniendo una postura más agresiva de lo que preveíamos, ya que busca evitar nuevas salidas de capital, actualmente esperamos entre 75 y 100 puntos básicos de recortes este año en un contexto de aceleración de la inflación y aumento del riesgo geopolítico. En vista de que la economía rusa experimentará una moderada recesión (crecimiento del -0,8%) en 2014, sus perspectivas de crecimiento a medio plazo también se presentan ahora más sombrías ante el estancamiento de las reformas, la existencia de elementos disuasorios de la inversión y el posible incremento del gasto en defensa. Mantenemos una opinión negativa con respecto a la deuda local rusa, esperamos que el RUB se siga debilitando (hasta 38,2/USD a finales de año), y en estos momentos nuestra opinión sobre la renta variable rusa también es negativa.
Por Evghenia Sleptsova.