Las autoridades indias tienen básicamente tres opciones para abordar la depreciación del INR: intervención monetaria, atracción de nuevos flujos de entrada o subidas defensivas del tipo. Durante el último mes, el Banco de la Reserva India (RBI) ha intervenido en el mercado monetario para "suavizar la volatilidad", con efectos modestos. La semana pasada, el RBI y la Comisión de Valores y Bolsa de la India tomaron medidas para asfixiar la liquidez en esos mercados, restringiendo las negociaciones por cuenta propia, recortando los límites de posición abierta y elevando el margen exigido. Ahora parece que se ha puesto sobre la mesa una potencial emisión soberana a favor de las subidas defensivas, aunque en lugar de aumentar el tipo de recompra, el RBI ha ideado una contracción de liquidez para elevar el coste del empeoramiento del INR, atraer flujos de entrada de capital y reducir los de salida. Si las condiciones financieras más estrictas resultantes perduran, se plantearán riesgos a la baja para el pronóstico de debilidad.
Por Alex Etra.