Debido a sus estrechos vínculos con el bloque monetario de la Eurozona, la transmisión de la crisis financiera de la Eurozona al Reino Unido es continua y significativa. Los canales financieros hacen que los bancos del Reino Unido estén desguarnecidos ante los efectos negativos de las exposiciones directas e indirectas a los activos con problemas, los tipos de interés de los préstamos y la disponibilidad de crédito, así como al proceso de desapalancamiento, los precios de las acciones y las condiciones financieras. El riesgo de redenominación tras una posible salida de Grecia de la Eurozona parece más manejable, ya que las exposiciones directas conjuntas de los bancos del Reino Unido a Grecia son de menos del 3% de las acciones tangibles. Sin embargo, las instituciones financieras de Reino Unido podrían verse afectadas por ciertos trastornos a través de canales secundarios, debido a las importantes exposiciones indirectas a determinados países (Francia, Alemania) que a su vez están expuestos a Grecia (y a los países PIIGS). No obstante, creemos que existen muy pocas posibilidades de que Grecia se declare en suspensión de pagos y abandone la Eurozona de forma desordenada. Los datos a nivel de los bancos (analizamos los seis grandes) ponen de manifiesto las vulnerabilidades específicas de cada banco. En términos generales, Barclays tiene la mayor exposición a los países PIIGS (concentrada en Irlanda) en comparación con el resto de bancos importantes del Reino Unido, por un importe de 62.200 millones de libras esterlinas o el 146% del capital básico de nivel 1 a fecha de junio de 2012. Algunos bancos ya han realizado provisiones significativas para dichas exposiciones (a fecha de junio de 2012).
Por Parul Walia y María Alejandra Oltra.