En el mes de septiembre, las ventas de viviendas en el mercado de segunda mano disminuyeron hasta 4,75 millones tasa anual desestacionalizada, ligeramente por encima de nuestras expectativas. El alto porcentaje de ventas en efectivo (28%), junto con el relativo descenso del porcentaje de transacciones de viviendas embargadas dentro del total, actúan como respaldo para los precios de las viviendas: el precio medio de las ventas de viviendas de segunda mano registró su séptima subida anual consecutiva. Los inventarios totales de viviendas a finales de septiembre se redujeron un 3,3% hasta la cifra de 2,23 millones: una oferta de viviendas para 5,9 meses al ritmo actual de ventas, por debajo de la cifra de 6,0 en agosto. Como promedio, las ventas de viviendas en el tercer trimestre realizarán una contribución significativa al segmento de las comisiones de los agentes dentro de la inversión residencial (para el que esperamos un crecimiento del 10% intertrimestral). No obstante, aunque la demanda de vivienda continuará mejorando en el futuro, la fortaleza del crecimiento de la misma dependerá de los riesgos macroeconómicos más generalizados a los que se enfrenta la economía.