Los datos del PIB chino en el tercer trimestre ofrecen nuevas pruebas de que agosto marcó el punto más bajo dentro del actual ciclo de crecimiento en Asia. Aunque la recuperación de China impulsará el crecimiento regional en el cuarto trimestre y en el primer semestre de 2013, no será sostenible mucho más allá de esa fecha. Junto con el crecimiento, parece que entre junio y agosto la inflación también ha tocado fondo en la mayoría de países asiáticos. La subida de los precios de los alimentos a nivel global y la flexibilización de las condiciones monetarias en los mercados desarrollados se trasladarán a la inflación de los mercados emergentes asiáticos durante los próximos meses. Asimismo, los recientes datos las exportaciones de Taiwán y China (dos barómetros de los mercados de exportación en toda Asia) sugieren que el crecimiento de las exportaciones en otras partes de la cadena de suministro puede tocar fondo pronto, debido al aumento de la demanda de otros mercados emergentes y EEUU. Siempre y cuando esta tendencia se mantenga, el aumento de la demanda de exportaciones debería traducirse en un fortalecimiento de la demanda interior, y con ello en la aparición de presiones inflacionistas durante los próximos meses.
Por Adam Wolfe, Nikhil Mohan, Michael Manetta y Ayoti Mittra.
