Estamos revisando al alza nuestra previsión de crecimiento para EEUU en base a la disminución de la tensión financiera, la existencia de signos de impulso en los datos recientes, especialmente en el mercado laboral, y a que el lastre fiscal es ligeramente menor de lo que suponíamos. Seguimos previendo un crecimiento por debajo del potencial en 2012: el desapalancamiento continuará siendo un asunto clave, y no se podrá sostener ningún consumo desenfrenado estimulado por los descensos de las tasas de ahorro. Además, la inversión en equipos será más comedida tras un sólido 2011. Con el fin de reforzar el mercado de la vivienda y estimular el crecimiento, se espera que la Reserva Federal aumente sus participaciones en valores con respaldo hipotecario.
Por Prajakta Bhide.
