El pasado 9 de febrero el BCE mantuvo invariables sus tipos de interés, con el tipo principal de refinanciación en el 1% y la banda en el 0,75% a ambos lados. La declaración adjunta afirmaba que "la tensión en los mercados financieros ha disminuido en respuesta a nuestras medidas de política monetaria", en medio de "signos provisionales de estabilización de la actividad económica en niveles bajos". La primera operación de refinanciación a largo plazo a tres años ha provocado la bajada de los diferenciales EURIBOR-OIS a tres meses. Las pruebas empíricas sugieren que después de esto se suele producir una flexibilización de las normas para la concesión de créditos, con lo que seguimos esperando un recorte de los tipos de 25 puntos básicos en marzo.