El tumultuoso movimiento de Eslovaquia para finalmente ratificar la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera nos proporcionó otro ejemplo más del continuo obstáculo que la dinámica de la política nacional supone para resolver la crisis de la zona euro. La inflación armonizada de la zona euro alcanzó el nivel más alto en tres años en septiembre, registrando un 3,0% de año en año. El mercado laboral de Reino Unido se está viendo presionado por la frágil actividad económica y la crecida de las pérdidas de trabajo en el sector público por causa de las medidas de austeridad. Finalmente, la victoria del partido de centro-derecha Plataforma Cívica (PO) pro europea en las elecciones al parlamento de Polonia del 9 de octubre vino con ganancias en el zloty y los bonos locales.
Por el equipo de analistas de Europa de RGE.