Los puertos de Shanghai vuelven a la normalidad después de que el gobierno haya capitulado a las demandas de los transportistas que habían ido a la huelga para protestar por las subidas de los costes. Mientras tanto, siguen sin mitigarse las medidas de fuerza contra los disidentes que siguen llamadas anónimas a la "revolución de los jazmines".
Por Adam Wolfe.