Aunque es probable que los pormenores del informe del PIB de EE UU se revisen, es innegable que en el cuarto trimestre de 2010 la economía consiguió un cierto impulso, y la demanda final se propulsó hasta el 7,2% desde el 0,9% del tercer trimestre; mientras tanto, en Canadá, los datos del IPC de diciembre sugieren que las presiones inflacionarias subyacentes se mantienen silenciadas, a pesar de los fuertes titulares producto de las presiones del sector de la energía.
Por el equipo de analistas de Norteamérica.