Grupo SanJosé ha sido la compañía adjudicataria de la construcción del nuevo centro hospitalario de Quirónsalud en la capital zaragozana, estando previsto que los trabajos comiencen este mes de agosto y se prolonguen durante 20 meses.
Será en marzo de 2024 cuando el nuevo hospital de Quirónsalud en Zaragoza esté finalizado tras acometer una inversión de 100 millones de euros en su construcción y equipamiento, aunque no se descarta que esta cuantía pueda ser superior ante la escalada de precios de las materias primas, según ha explicado Miguel Ángel Eguizábal, gerente de los Hospitales Quirónsalud Zaragoza, durante el encuentro mantenido con los medios de comunicación en la capital aragonesa.

De acuerdo con los datos del proyecto, el centro hospitalario, situado en la prolongación de Gómez Laguna, tendrá una superficie de 30.000 metros cuadrados y en su diseño se ha realizado un trabajo "concienzudo" en el que se ha contado con la participación de los equipos médicos con el fin de proporcionar la máxima calidad asistencial, ha explicado Eguizábal, quien ha resaltado que será un hospital emblemático tanto para el grupo como la para la ciudad y la comunidad aragonesa.
El futuro hospital aumentará la capacidad asistencial de Quirónsalud con el fin de dar servicio a todo el valle del Ebro, aparte de responder a la creciente demanda de servicios médicos. "Nuestro termómetro nos indica que Zaragoza necesita este nuevo hospital". De hecho, en el primer semestre de este año, los datos de atención de Quirónsalud reflejan un aumento del 25% en comparación con el mismo período de 2021 en el área de urgencias, además de crecer un 13% en intervenciones quirúrgicas y alrededor de un 15% en pruebas como las mamografías.
El futuro centro
El nuevo hospital, que nace con el objetivo de dar respuesta a las necesidades sanitarias durante los próximos 50 años, permitirá pasar de los 12.000 metros cuadrados actuales a 30.000 metros cuadrados para disponer de más capacidad -estará cerca de duplicarse en relación a la actual-, mejor distribución de espacios, mayor capacidad de consultas externas, más quirófanos y más camas de hospitalización. Además, también se incorporarán tecnologías punteras para facilitar tanto el trabajo de los profesionales como la atención a los pacientes.
El centro hospitalario, que estará digitalizado y favorecerá la investigación y la docencia, será referente nacional en cinco áreas entre las que se encuentran oncología, mujer y cuidado del niño, salud cardiovascular, neurociencia y cirugía ortopédica y traumatológica.
El nuevo hospital, que estará distribuido en tres bloques y que contará con más de 250 camas y 135 consultas externas, también dispondrá de un instituto específico para abordar la salud de la mujer y el niño, aparte de poner en marcha la primera UCI pediátrica y neonatal en un hospital privado. Las instalaciones acogerán a su vez una unidad de obstetricia con cinco unidades de trabajo de parto y recuperación y dos quirófanos de cesáreas, entre otras instalaciones.
El área de oncología será clave, contando con un hospital de día oncológico con 16 puestos, un acelerador lineal, un departamento de medicina nuclear con equipos PET-CT y SPECT-CT y una unidad de ensayos clínicos.
Los servicios médicos del nuevo hospital incluyen también una unidad cardiovascular con un quirófano híbrido para patologías estructurales y avances en imagen cardiaca, aparte de crearse el Instituto de Corazón para impulsar la investigación y optimización de los tratamientos en estas patologías.
Además, habrá una unidad de una unidad de pruebas funcionales digestivas y otra de pruebas funcionales de urología, así como un servicio de Diagnóstico por Imagen con tres resonancias magnéticas, de las cuales una será de 3 Teslas.
El bloque quirúrgico incorporará 14 quirófanos, que estarán equipados con la última tecnología. También se dispondrán de 26 camas uci -14 para adultos y 12 pediátricas-; una capacidad para 28 pacientes en la zona de reanimación postquirúrgica y 16 habitaciones para el hospital de día quirúrgico.
El nuevo centro también se caracterizará por su diseño, optando por la sostenibilidad energética y ambiental tanto en la fachada como en el conjunto de las instalaciones, que se proyectarán con una orientación específica para optimizar el aprovechamiento solar -se facilita a su vez la iluminación natural en los diferentes espacios-, y proteger las zonas sensibles del cierzo y de la contaminación acústica, entre otros aspectos.