
El primer envío de los fondos europeos deja un mal sabor de boca en el sector sanitario. De los primeros 50.000 millones de los que ha informado el Gobierno, para Sanidad irán destinados poco más del 1,5%, lo que se traduce en 1.069 millones de euros. La cifra, por ponerla en contexto, es inferior a lo que constaría renovar el parque tecnológico en España con más de diez años, que alcanza los 1.600 millones de euros en cuatro años según las estimaciones realizadas a principios de 2020 por la patronal Fenin. De hecho, los cálculos no deben estar muy desencaminados porque el Gobierno, para sus primeros presupuestos, ya destinó 400 millones.
En este contexto, los representantes de las empresas demandan transparencia, imparcialidad y una gobernanza clara en la selección de los proyectos que se presentarán a Europa y en su gestión. De que se cumplan estas condiciones depende, aseguran, el éxito o el fracaso de una iniciativa en la que muchos ven en juego el futuro de la industria sanitaria española. La llegada de los fondos es una oportunidad para el triunfo, pero su mala gestión tendría como consecuencia un retroceso respecto los demás países que habría que sumar a las dificultades que ya de por sí la pandemia ha creado en nuestro entorno.
Renovar el parque tecnológico hospitalario cuesta 1.600 millones
Es la visión de Carlos Royo, presidente de la Comisión de Salud Digital de AMETIC y Coordinador del Macro Proyecto Tractor de Salud coordinado por AMETIC y apoyado por la CEOE, que habla de "una oportunidad sin precedentes". AMETIC empezó a trabajar hace cuatro años en un proyecto tractor para la digitalización de la sanidad para posicionar a España entre los primeros cinco países tractores de desarrollo, validación, certificación y empleo de la innovación sociosanitaria bajo la visión OneHealth.
En él participan la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN), la patronal del medicamento Farmaindustria, la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO), la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) y un largo listado de representantes del sector. AMETIC incluso ha puesto a disposición de sus socios un canal informativo específico sobre los Fondos Europeos y el Plan de Recuperación.
Uno de los aspectos que aún está por definir y que tiene una importancia crucial es la gestión de los proyectos en los que la actividad trasciende a un departamento -sanidad, digitalización, agricultura-, algo intrínseco a las iniciativas OneHealth. Aunque considera probable que se lleven desde el Ministerio de Economía, es algo que sigue sin saberse. En el momento de imprimir estas líneas, desde el Ministerio de Sanidad no se había dado aún respuesta a la solicitud de información realizada desde elEconomista al respecto.
"Transparencia, rendición de cuentas, eficacia, imparcialidad y participación, al margen de consideraciones políticas" pide Ignacio Gomá, presidente de la fundación Hay Derecho. Su máxima, prestada del filósofo inglés Jeremy Bentham: "Cuanto más te observo, mejor te comportas". Según Gomá, del buen funcionamiento de las instituciones dependerá el éxito o el fracaso de los Fondos.
La posibilidad de fracaso es muy real, y reside en la condición de que, como señala Royo, hay una espada de Damocles sobre todos los proyectos: Los responsables de aquellos que no cumplan los objetivos descritos y los criterios establecidos por la UE y hayan recibido parte de los Fondos, tendrán que reembolsar las cantidades recibidas.
Spanish Women Leaders in Life Sciences (SWL), un grupo independiente de mujeres profesionales con puestos de responsabilidad en el sector de la salud, ha pedido al gobierno que la salud sea destinataria prioritaria de los Fondos "en una cuantía equivalente a la importancia estratégica del sector en la economía real". Se han sumado al llamamiento en favor de la asignación eficaz y transparente de los fondos, a la cual piden que siga una evaluación rigurosa de los resultados obtenidos y los objetivos que inicialmente se persigan con cada proyecto. "El momento de actuar es ahora, porque las consecuencias de no hacerlo son demasiado graves", ha dicho el grupo en un reciente comunicado.
El papel de las pymes también preocupa, ya que es más difícil para algunas de ellas vehiculizar estos fondos. Sobre ellos se ha pronunciado la Cámara de Comercio de Madrid. "El papel de las pymes está garantizado en los fondos europeos, tanto a nivel individual como en los PERTES, donde será requisito contar con ellas para poder constituir las agrupaciones empresariales". Así lo ha explicado el secretario general de Industria y de la Pyme, Raúl Blanco durante un encuentro virtual mantenido con el presidente de la Cámara de Comercio de Madrid, Ángel Asensio, en el que ha detallado las particularidades de los fondos para la recuperación y su aplicación a las pymes.
En concreto, Blanco ha hecho referencia a los 70.000 millones de prestaciones netas que recibirá España dentro del programa Next Generation de la UE para su distribución entre los próximos 2021 y 2023. Tras indicar que España se sitúa como el primer país de la UE con mayor dotación de Fondos de recuperación, el secretario de Industria ha explicado cómo impacta el plan de recuperación del Gobierno en la modernización y digitalización del tejido industrial y de la pyme, la recuperación del turismo e impulso a una España nación emprendedora. Se trata de una política palanca que contará con un 17,1% de las inversiones, "por lo que para Industria es una parte básica del plan de recuperación", ha indicado.
En su conjunto, el componente de Industria estará dotado de 3.938 millones de euros a los que se sumarán las partidas existentes en los presupuestos generales del estado. En este caso, las cuantías contribuirán a las reformas sobre el impulso industrial, las políticas de residuos y fomento de la economía circular, y a los instrumentos de acompañamiento a los consumidores electrointensivos. "Son tres paquetes que ya están en marcha para garantizar el futuro de la industria en nuestro país", ha asegurado Blanco.
En lo que respecta a las pymes, Blanco ha manifestado que el objetivo será apostar por la creación de empresas, algo que será posible en el marco de la ley de startups. Además, los fondos contemplarán recursos para potenciar el crecimiento y restructuración de las pymes; cubrir todo el ciclo de vida de digitalización; así como mejorar las unidades productivas. Asimismo, se incluirán líneas de internacionalización y capacitación digital. En relación al sector turístico, el secretario de Industria ha indicado que la inversión de los fondos será de 3.400 millones para los próximos tres años y va a ir centrada a potenciar el destino turístico en España, a proyectos destinados a sostenibilidad y digitalización.
La colaboración público privada es necesaria para alcanzar el objetivo
Para realizar una rigurosa difusión del plan, el secretario ha confirmado que "la colaboración público-privada es absolutamente necesaria", por lo que "estamos colaborando con las cámaras para hacer la máxima difusión". En relación a la solicitud de las ayudas, Blanco ha mantenido que los fondos estarán dirigidos a las empresas a través de las convocatorias públicas, sin intermediario, y "van a ser asignados de manera creciente" para permitir aumentar la competitividad. "Lo que importará es lo maduro, sensato y el impacto del proyecto, independientemente del tamaño", ha afirmado.
Además, aunque por el momento se desconoce el calendario definitivo de la ratificación de los fondos, ese trimestre "es decisivo", ha puntualizado Blanco, que ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad: "esto es una oportunidad única y tiene que salir adelante", dijo.
Durante su intervención, el presidente de la Cámara de Madrid, Ángel Asensio ha calificado los fondos como un proyecto "clave" para la recuperación del país, así como para promover la transformación estructural a corto, medio y largo plazo. "Es capital que los fondos lleguen a las empresas para garantizar el efecto multiplicador".
En este contexto, Asensio ha abogado por impulsar la sostenibilidad con proyectos de transformación verde, energías renovables y economía circular, además de fijar la hoja de ruta para acelerar la digitalización, apostar por la formación y por una industria más diversificada a través de la internacionalización. "Es vital para garantizar el futuro de nuestras empresas y el empleo que hay, para ser más eficientes y ser más competitivos", aseveró.