Las semillas de chía están muy de moda en la actualidad. Tanto es así que se consideran la mejor fuente vegetal de ácidos grasos Omega-3 beneficiosos para cuidar el colesterol. Y no solo eso: tan solo una cucharada de esto te proporciona el 20% de la fibra diaria recomendada.
Origen
Perteneciente a la familia de la menta, la chía (denominada por la comunidad científica como Salvia hispánica) es nativa de México y Guatemala y ha sido cultivada desde tiempos precolombinos por los aztecas. De hecho, las leyendas cuentan que los guerreros aztecas podían sostenerse todo el día alimentados con una cucharada de chía.
Sin duda alguna, todas sus virtudes dietéticas llamaron la atención al mundo occidental. Aunque durante un buen tiempo no se han tenido en cuenta en muchas culturas y dietas saludables, ahora muchos especialistas en nutrición la consideran un superalimento.
Propiedades
Entre sus beneficios, cabe destacar los siguientes, según el portal especializado 'Tua Saúde':
- Son una excelente fuente de vitaminas del grupo B y minerales, especialmente calcio, fósforo y magnesio. Y son muy ricas en antioxidantes como el selenio.
- Son muy bajas en sodio y las pueden tomar aquellas personas que quieren reducir la sal en su dieta.
- Combaten el estreñimiento. Es rica en fibra soluble, un tipo de fibra que absorbe agua en las heces, hidratándolas y haciéndolas más suaves.
- Fortalece los huesos. Es una fuente natural de calcio y magnesio, minerales esenciales para mantener la densidad ósea y prevenir enfermedades relacionadas con la pérdida de masa ósea
- Ayuda a bajar de peso. Absorbe gran cantidad de agua en el estómago, formando una especie de gel que aumenta el tiempo de digestión de los alimentos y reduce el hambre a lo largo del día.
- Revitaliza tus rodillas. Al ser una excelente fuente de fibra y omega-3, contribuye a reducir la inflamación, lo que también ayuda a aliviar molestias articulares.
- Evita el envejecimiento precoz. Contiene ácido clorogénico y ácido cafeico, compuestos con acción antioxidante que combaten el exceso de radicales libres.
A tener en cuenta
Cabe destacar que, para aprovechar todos sus aspectos positivos, podemos añadir las semillas de chía a un zumo de frutas o a una infusión, y conseguir una consistencia espesa después de 60 minutos de reposo, aproximadamente, obteniendo una gelatina de manera muy sencilla.
Ahora bien, también se pueden añadir las semillas de chía sin necesidad de ser remojadas a una ensalada, como cereal de desayuno con leche o leches vegetales, agregado como complemento de un yogur o bien simplemente integrarlo en las elaboraciones de panes caseros.