
Los problemas de suministro no han dejado de crecer en España. En 2024, el aumento fue de hasta el 41% con respecto a 2023, aunque el medicamento que más faltó ha cambiado: si en 2023 fue Ozempic, el antidiabético de Novo Nordisk, ahora este ha sido reemplazado por Concerta, el fármaco para el trastorno de déficit de atención en hiperactividad (TDAH) de Johnson&Johnson.
Aunque el grupo de antidiabéticos sigue siendo el más afectado en general, Concerta ha superado en 8 puntos porcentuales las notificaciones de desabastecimiento con respecto a Ozempic. Así se recoge en un informe de Luda Partners, compañía dedicada a proveer de tecnología a las farmacias para solventar los problemas de suministro en España.
Su cofundador, Luis Martín, ha achacado la falta de Concerta a problemas con el principio activo, sumado a un aumento de la demanda a partir de octubre de 2024 que se asocia al inicio del curso escolar. Por su parte, el desabastecimiento de Ozempic está relacionado con una alta demanda inducida por las redes sociales, ya que se ha extendido su uso para adelgazar.
Entre las causas estructurales, en cambio, Martín ha apuntado a la regulación de los precios de los medicamentos. En este sentido, ha explicado que la normativa de los precios de referencia de los fármacos ha llevado a mantener el precio a pesar de los incrementos de los costes de producción, distribución y venta. "Si Ozempic vale tres veces más en Inglaterra de lo que vale en España, en caso de escasez internacional, lo más probable es que se lo lleve Inglaterra. La tendencia del mercado es ir a otros sitios donde esta más caro", ha declarado.
En este sentido, el fundador de la compañía ha hecho hincapié en que, en España, "se desabastecen los medicamentos más caros", si bien hay excepciones con el caso de Concerta, que es muy barato. De hecho, según el informe, el precio medio de los medicamentos en general muestra fluctuaciones mensuales, con picos en los meses de mayo, junio, julio y diciembre. Durante estos meses, los diez medicamentos con más desabastecimiento alcanzan precios significativamente más altos, con un promedio de hasta 80,53 euros en julio y 76,49 euros en diciembre.
En contraste, el resto de medicamentos, que presentan menos faltas, mantienen precios más constantes y generalmente más bajos, con un rango de 29,87 a 37,52 euros a lo largo del año. "La diferencia de precio entre los medicamentos más afectados por el desabastecimiento y los más estables es considerable, con los primeros siendo casi de 2 a 3 veces más caros que los segundos", se destaca en el documento.
Escasez en el fármaco para tratar helicobacter pylori
También se han notificado desabastecimientos en Pylera, el único antibiótico con el que se puede tratar la infección por helicobacter pylori. Al igual que el caso de Concerta, la escasez se asocia a problemas del principio activo.
En total, los grupos terapéuticos con mayores problemas de suministro han sido los antidiabéticos (13%), los psicoestimulantes para el TDAH (11%) y los agentes contra la úlcera péptica y el reflujo gastroesofágico (5%). El 71% restante pertenece a otros grupos.
Más allá de Ozempic (44% de los desabastecimientos), otros antidiabéticos que también han sido localizados por la herramienta de Luda han sido Trulicity (24%), Fiasp (7%), Novorapid (5%) y Victoza (4%). En cuanto a los fármacos neuroestimulantes, además de Concerta (55% de los desabastecimientos), se encuentran Equasym (10%), Elvanse (9%), Medikinet (8%) y Atenza (7%).