
El Ministerio de Sanidad permitirá la donación de órganos entre personas con VIH, prohibida desde 1987. Para ello, ha sacado a consulta pública la derogación de la Orden que lo impedía, equiparando el abordaje de la infección por VIH al de otras infecciones que no limitan esta actividad.
Así lo ha anunciado la ministra de Sanidad, Mónica García, en el acto de conmemoración del Día Mundial del Sida, que este año lleva por lema 'Las mejores relaciones se viven sin prejuicios'. El proceso de consulta estará abierto hasta el próximo 16 de diciembre.
En total, hasta 65 personas fallecidas por VIH en la última década podrían haber donado sus órganos, posibilitando hasta 165 trasplantes, según la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Además, cada año, unos 50 pacientes con VIH entran en lista de espera para trasplante en España.
En este punto, cabe aclarar que hoy día ya se realizan trasplantes de todo tipo de órganos en pacientes infectados por el VIH en España, habiendo alcanzado la cifra de 800 hasta el momento. En concreto, se han registrado 311 trasplantes de riñón, 510 de hígado, 11 de pulmón, 10 de corazón y uno de páncreas-riñón, con buenos resultados y respetando los criterios de selección de receptores establecidos en el Documento de Consenso Nacional.
Tras la retirada de la mencionada orden, se acabaría con una reivindicación histórica del colectivo de pacientes para acabar con el estigma asociado a la enfermedad. Si entre los 80 y los 90 se consideraba este tipo de trasplantes como una práctica de alto riesgo, a principios de los años 2000, con la llegada de los antirretrovirales, esta creencia comenzó a desmontarse. En estos años comenzaron a publicarse las primeras experiencias sobre el trasplante de órganos en receptores con VIH con resultados esperanzadores.
Estos cambios quedaron recogidos en el Documento de Consenso Nacional adoptado en 2005 por la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), el Plan Nacional sobre el Sida y la ONT. "Se dijo claramente que la persona con VIH se puede y debe trasplantar", ha rememorado la directora general de la ONT, Beatriz Domínguez-Gil. Los requisitos para llevar a cabo este procedimiento son tener una carga viral suprimida y estar en terapia antirretroviral.
En este punto, la ministra de Sanidad ha recordado que en España, actualmente, la esperanza de vida de las personas con VIH es "cada vez más parecida" a la de la población general debido a la alta eficacia de los tratamientos. "La mayor esperanza de vida necesita nuevas prestaciones. Es un avance impresionante, fruto del empuje de las sociedades científicas y del activismo social", ha declarado.
De igual forma se ha pronunciado la directora de la ONT. "Esta orden ocurrió en un momento histórico que obligaba a las autoridades sanitarias a evitar la infección a través del trasplante", ha aclarado, insistiendo en la importancia de la derogación. Según la directora general de la ONT, España es aún de los pocos países que tenían en vigor esta norma, junto con Portugal, si bien estas intervenciones ya se permiten en otros como Francia o Italia. "Lo fundamental es poder realizar este tipo de trasplantes por dos objetivos: aumentar la disponibilidad de órganos y contribuir a eliminar el estigma social de la persona VIH ofreciéndoles la oprtunidad de donar órganos en vida o tras su fallecimiento", ha incidido.
Finalmente, en referencia a las cifras de detección de VIH, la ministra de Sanidad ha hecho hincapié en la importancia de la prevención mediante la educación sexual. En este punto, ha recordado que su departamento "está trabajando" para la gratuidad de los preservativos en los jóvenes.
Elevadas tasas de diagnóstico tardío de VIH en España
Asimismo, García también ha advertido de que no se está disminuyendo "a la velocidad necesaria" el número de diagnósticos de VIH. "Seguimos en tasas elevadas de diagnóstico tardío", ha lamentado. La tasa de nuevos diagnósticos de VIH lleva unos años ralentizándose en España, manteniéndose aproximadamente en los 6 casos por 100.000 habitantes. Con todo, aunque es una cifra similar a las de otros países de Europa Occidental, sigue siendo superior a la media de los países de la Unión Europea.
Así, en 2023, último periodo del que el Ministerio de Sanidad tiene registros, se notificaron un total de 3.196 nuevos diagnósticos de VIH, lo que supone una tasa de 6,65 por cada 100.000 habitantes. No obstante, debido a retrasos en las notificaciones, se estima que la cifra real es de 7,38.
Es un número muy parecido al del año anterior, cuando se registraron 6,97, mientras que en 2021 se notificaron 6,67 y en 2020, 6,29. Casi todos los casos, el 86%, eran hombres, y la media de edad fue de 36 años. Como es habitual, la vía sexual es el modo de transmisión principal en los nuevos diagnósticos.