
El Servicio Andaluz de Salud (SAS) retira que las farmacias tengan que promover la dispensación de genéricos cuando se prescriban medicamentos por principio activo. Así, ha decidido "atender" el requerimiento de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la adenda del convenio entre el SAS y el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cacof).
Ante la posibilidad de que el punto dos de la adenda pueda ser malinterpretado o dar lugar a confusión, entendiendo que implica una obligación para las oficinas de farmacia de dispensación preferente de medicamentos genéricos respecto a los de marca, se ha acordado atender el requerimiento realizado y eliminarla en lo relativo a que las oficinas de farmacia, cuando se prescriban medicamentos por principio activo que dispongan de genéricos, promoverán su dispensación, según adelantó eldiario.es.
Así, la Consejería de Salud de Andalucía apunta que la "promoción" de los genéricos no conlleva "una obligación de dispensar, en cualquier circunstancia, los medicamentos genéricos frente a los originales". Tampoco "prevé formalmente ningún compromiso para las oficinas de farmacia de dispensar el medicamento genérico antes que el original en los casos en los que estos tengan un mismo precio" y "ni siquiera establece ningún tipo de medida de vigilancia, coercitiva o punitiva respecto a su cumplimiento por parte de las oficinas de farmacia".
Asimismo, se mantiene que los farmacéuticos destinen al SAS el 5% del importe de la facturación con carácter mensual de la venta de genéricos, calculado según el Precio de Venta al Público con el IVA incluido. Están excluidos los medicamentos no sustituibles. Además, la información debe ser remitida antes del día 5 del mes siguiente al que corresponda la factura. Cabe subrayar que este pago es efectivo desde el pasado mayo.
La CNMC comunicó que había requerido al SAS que anulase "la adenda al convenio firmado con el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos" ya que priorizaba la venta de medicamentos genéricos en las farmacias en detrimento de los de marca. Esto vulneraba el el principio de no discriminación de la Ley de Garantías de la Unidad del Mercado (LGUM). En concreto, los artículos 3 y 18.
En este sentido, un centenar de farmacéuticos andaluces presentaron un recurso ante Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra la adenda para la promoción de los medicamentos genéricos. Pedían su suspensión cautelar.
En cuanto al 5% que deben dar al SAS de la facturación mensual, los farmacéuticos entienden que esta decisión genera "un importante menoscabo económico". Además, afirman en su escrito que "no sólo pierden ingresos sino que deben seguir pagando a sus proveedores los medicamentos que dispensan a los usuarios del SAS", convirtiéndose "de manera forzosa en cofinanciadores del gasto público sanitario andaluz".