Europa no quiere volver a pasar un invierno como el anterior. Por ello, ha lanzado una serie de medidas a corto plazo para evitar la escasez de medicamentos, mientras se debate la propuesta de reforma de la ley farmacéutica europea.
Según la Comisión Europea, es clave el establecimiento de un mecanismo voluntario entre los estados miembros para llenar los vacíos de terapias. "La medida permite a los países de la Unión Europea señalar a otros las necesidades de un determinado fármaco en situación de escasez crítica a nivel nacional, para que puedan indicar la disponibilidad de existencias que podrían redistribuirse", afirman.
Además, pretenden introducir un plan de compra conjunta entre los Estados miembros de antibióticos y medicamentos dirigidos a las enfermedades respiratorios. Este tendría lugar antes del invierno de 2024 y 2025.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) junto a países como España, Bélgica, Francia o Alemania están realizando y reduciendo una lista de fármacos estratégicos o críticos – que debe estar terminada a finales del presente año - con el objetivo de mejorar su seguridad de suministro.
España fue el primer país en establecer este listado a nivel nacional. A diciembre de 2022, había un total de 541 medicamentos y 295 principios activos. Es más, un 22,5% están dirigidos a tratar infecciones bacterianas, un 21% al sistema nervioso y un 10% al cáncer y patologías del sistema inmunitario.
Actualmente el listado contiene entre 100 y 350 tratamientos. Cada uno de ellos debe pasar por una evaluación de vulnerabilidad para ver que se requiere y, a posteriori dialogar con la industria farmacéutica para incrementar la producción de estas terapias. Las medidas se adoptarán en abril de 2024.
