
Instituciones y compañías innovadoras buscan las nuevas fórmulas de éxito para mejorar la atención a las enfermedades del campo de la salud mental. Con el Día Mundial por la Salud Mental, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos difunden sus nuevas directrices para el cuidado de la salud mental, con el objetivo de ayudar a los países a mejorar su legislación y promover el acceso a una atención de calidad en el área de salud mental. En los laboratorios, los equipos de investigación han redoblado sus esfuerzos con un total de 118 potenciales nuevos medicamentos con nuevos mecanismos de acción ya en fases de 1 a 3 (probadas en pacientes). Son 44 fármacos para la depresión, 29 para esquizofrenia, 23 para trastorno por ansiedad, 9 para trastorno bipolar, 6 para hiperactividad y déficit de atención y 7 más para diversas indicaciones en el área de neuropsiquiatría, según un estudio publicado en la revista científica 'Expert opinion on drug discovery'.
La OMS ha puesto de relieve en la información que difunde con motivo de esta jornada que es posible, y no es una cuestión exclusivamente ligada al gasto, mejorar los cuidados que se proporcionan a estos pacientes. A modo de ejemplo, señalan que la mayor parte del gasto público en salud mental se destina a hospitales (el 43% en los países de ingresos altos). "Sin embargo, se ha demostrado que los servicios de atención comunitaria a la salud mental son más accesibles, rentables y eficaces", indican.
Hacia la psiquiatría de precisión
De acuerdo con la investigación sobre los avances terapéuticos en este campo, la identificación de cientos de genes y proteínas que intervienen en el funcionamiento del cerebro va a permitir ofrecer nuevas terapias en un plazo de tiempo relativamente corto.
Por otro lado, de acuerdo con expertos de ciencias del comportamiento y salud mental de los estadounidenses Institutos Nacionales de Salud (NIH), las nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, permiten poner a prueba nuevos mecanismos de acción y biomarcadores que van a facilitar una clasificación cada vez más detallada de cada condición. Tal como ellos lo ven, está emergiendo una nueva disciplina, la psiquiatría de precisión, que combina genética, tecnología digital y biomarcadores para acercarnos a las terapias de nueva generación, para instaurar el tratamiento en fases precoces y elevar al máximo los beneficios terapéuticos, reduciendo la carga de enfermedad de las personas que viven con alteraciones de la salud mental.
En la OMS hay un optimismo moderado, puesto que en su último informe al respecto se reconocen ciertos avances pero estos se califican de "lentos".
El Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, ha señalado con motivo del Día Mundial: "La salud mental es un componente integral y esencial del derecho a la salud. Estas nuevas orientaciones ayudarán a los países a introducir los cambios necesarios para prestar una atención de salud mental de calidad que ayude a la persona a curarse y que respete su dignidad, capacitando a las personas con trastornos mentales y discapacidades psicosociales para que lleven una vida plena y saludable en su entorno social".
Por su parte, Volker Turk, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ha afirmado: "Debemos tratar de transformar los servicios de salud mental, no solo en cuanto a su alcance, sino también en cuanto a los valores que los inspiran, para que satisfagan verdaderamente las necesidades de las personas y las traten con dignidad. Esta publicación ofrece orientaciones sobre un enfoque basado en los derechos que puede ayudar a introducir los cambios necesarios en los sistemas de atención a la salud mental".
Más cerca de los pacientes
Quizá uno de los pasos que haya que dar es la proximidad a los pacientes. De acuerdo con el último informe del colectivo 'Patient View', "el optimismo de quienes se dedican a la I+D en salud mental no se ha transmitido a los pacientes". En 2022 -lamentan- ninguna de los 41 nuevos principios activos aprobados en Europa estaba indicado para enfermedades de esta especialidad.
"Más investigación y diálogo sobre la investigación en este campo; queremos mejores tratamientos", es una de las afirmaciones recogidas en ese sondeo, en este caso en boca de las asociaciones de Irlanda.
Asociaciones de pacientes con este tipo de condiciones evaluaron la reputación corporativa de AstraZeneca, Eli Lilly, Janssen, Lundbeck, Otsuka y Pfizer y destacaron Janssen, Pfizer, AstraZeneca y Eli Lilly como las mejores. Al evaluar las actividades conjuntas de las compañías y los grupos de pacientes Janssen, Lundbeck, Otsuka y Pfizer resultan situadas en lo alto de la lista (las dos últimas empatadas).
Estas valoraciones se corresponden con 82 grupos de pacientes que representan a 741.600 personas.
Puesto que todas las compañías evaluadas en el sondeo están desarrollando actualmente estrategias orientadas a los pacientes, los autores consideran que es posible que su informe tenga utilidad para los responsables de dichos planes.
Según la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental (SEPSM), las personas con trastornos mentales graves mueren entre 10 y 20 años antes que la población general, sobre todo si padecen enfermedades crónicas inadecuadamente identificadas o tratadas, tales como trastornos psicóticos, trastorno bipolar y depresión entre moderada y grave.
En la V Cumbre Mundial en Salud Mental, que se desarrolla estos días en Buenos Aires, el ministro de Sanidad en funciones, José Miñones, ha anunciado que España va a impulsar un acuerdo en el Consejo Europeo para asegurar un marco homogéneo de actuación en la UE en torno a la salud mental, a la que se ha referido como "una cuestión prioritaria en el marco de la Presidencia española del Consejo de la UE".