La compañía farmacéutica Almirall gana 12 millones de euros en el primer semestre de 2023, un 56% menos respecto al ejercicio anterior (27,3 millones). Por otro lado, el ebitda (Resultado Bruto de Explotación) ha registrado 101,3 millones, cifra que implica un descenso interanual del 5,9%, recogido hoy en el informe financiero de la compañía.
Almirall ha obtenido, en general, 466,1 millones en ventas, un 6,8% más. Detrás de esta cifra se encuentra un crecimiento en Europa y una caída de las mismas en Estados Unidos. En el mercado del Viejo Continente, los ingresos se incrementaron pasando de obtener 374 millones en el primer semestre de 2022 a 407,9 millones antes de cerrar los seis primeros meses de 2023. Sin embargo, la farmacéutica ha experimentado una bajada de su facturación en el mercado estadounidense. En concreto, ha obtenido 30 millones, un 12,5% menos respecto al ejercicio anterior (34,3 millones).
El lado positivo para la compañía es que su principal motor, la dermatología, cosecha buenos resultados. El proceso de transformación que Almirall empezó a principios de la década anterior tiene buenos resultados. A día de hoy, el negocio de la dermatología representa la mitad de las ventas de la farmacéutica. En Europa, la compañía ha facturado 194,3 millones. En concreto, un 15% más respecto al primer semestre de 2022 (168,9 millones).
En cuanto al catálogo de productos, destaca Ilumetri, un medicamento para la psoriasis sobre el que Almirall tiene los derechos de explotación en Europa. Ha alcanzado unas ventas de 80,4 millones de euros durante el primer semestre, casi un 40% más que en el mismo periodo del año anterior. El segundo medicamento, en este caso grupo, con mayor crecimiento de ventas ha sido la Franquicia Decoderm. Ha pasado de registrar 15 millones hace un año a 15,9 millones, un 5,8% más. Además, Solaraze, un tratamiento para la queratosis solar o actínica, ha obtenido unas ventas de 9,7 millones en el primer semestre, un 2,1% más respecto al mismo periodo del año anterior (9,5 millones).
Por otro lado, Wynzora, la terapia para la psoriasis por la que Almirall desembolsó 15 millones de euros más royalties sobre ventas, ha facturado 7,7 millones frente a los 2,6 millones que registró hace un año. Además, el medicamento ha logrado un 19% en la cuota de mercado en España mejorándola. Por otro lado, Klisyri, fármaco para la queratosis actínica, mantiene una fuerte adopción en la Unión Europea.
De igual importancia, se encuentra la situación de Almirall en Estados Unidos. Klisyri es uno de los pocos medicamentos del catálogo de Almirall en el país que ha registrado un aumento de ventas. En concreto, un 37,9% pasando de ingresar 2,2 millones en el primer semestre de 2022 a 3 millones en el mismo periodo del presente año.
Sin embargo, el medicamento Seysara, el cual se presentó como una de las promesas de la compañía, ha disminuido sus ventas de un año para otro pasando de 10,4 millones a 9,3 millones, un 10,4% menos. Además, Aczone sigue descendiendo en facturación debido a la aparición de genéricos. Ha pasado de ingresar 3,4 millones en el primer semestre de 2022 a 2,5 millones, lo que supone una disminución del 26,2%. También han bajado las ventas de Tazorac, un tratamiento para el acné. De hecho, es el que ha padecido la mayor disminución. En concreto, un 37,7% pasando de registrar 6,4 millones al cierre del ejercicio de los seis primeros meses de 2022 a cuatro millones en el mismo periodo de 2023.
En cuanto a Innovación y Desarrollo (I+D), la farmacéutica ha empleado 52,5 millones en el primer semestre de 2023. Esta cifra supone un aumento del 10,3% respecto al mismo periodo del año anterior que se invirtió 44,9 millones.
Tras presentar estos número en el informe, Almirall "reitera" el guidance previsto para 2023. Además, se está preparando para la aprobación y lanzamiento de Lebrikizumab, su nueva apuesta para la dermatitis atópica. Esta tendrá lugar en el cuarto trimestre del presente año. A día de hoy, está esperando el visto bueno de las autoridades reguladoras.
