La Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) lamenta las declaraciones realizadas por la Alianza UPA-COAG de Castilla y León, en las que pone en duda la trazabilidad del cordero procedente de países vecinos europeos, "cuestionando el libre comercio".
"Desde Anice lamentamos estas declaraciones, porque no solo ponen en duda el control exhaustivo que ejercen nuestros sistemas europeos alimentarios, uno de los más rigurosos del mundo en trazabilidad y seguridad alimentaria, creando desconfianza en el consumidor; sino que además atenta contra el libre comercio, obstaculizándolo y pudiendo afectar a las economías y al funcionamiento de los mercados", explican a través de un comunicado. La entrada masiva de corderos que denuncian Upa y Coag
La asociación recuerda que España forma parte del Mercado Común Europeo y "muchos ganaderos y productores españoles, incluidos los que desarrollan su actividad en Castilla y León, exportan animales para que sean sacrificados fuera de nuestro país, en determinadas épocas del año".
"Por el mismo motivo, no sería de recibo aceptar agravios comparativos de nuestra producción en otros países. Son las reglas de un mercado, afortunadamente libre y abierto. No podemos permitir que determinadas afirmaciones y malas interpretaciones contribuyan a debilitar el mercado común europeo, limitando el crecimiento de las empresas y la creación de oportunidades fuera de nuestras fronteras, cuando además la circulación de alimentos en el mercado europeo está absolutamente regulada", añade.
Para Anice, estas declaraciones lo único que hacen es contribuir a generar un clima innecesario de desconfianza por parte del consumidor en un momento decisivo para el sector cárnico-ganadero (y en especial para el ovino) como es la Navidad, debilitando su consumo.
Desde ANICE, avalan los sistemas de control e identificación de los animales y sus productos, como la mejor herramienta de garantía de la calidad, la trazabilidad y la seguridad alimentaria, y también la certificación de los productos con denominaciones de calidad protegidos por Europa, que disponen de sus órganos reguladores para que se garantice en todo momento la calidad y el origen de sus productos certificados. "Abogamos por enfoques de mercado equilibrados que no comprometan la diversidad de los productos disponibles en un mercado libre como es el europeo".
Por último, señalan que el consumidor puede estar seguro y preocuparse tan solo de disfrutar del cordero o "de cualquiera de nuestras excelentes carnes en estas fiestas".