Los resultados consolidados de Grupo Sibuya en 2022 han sido mejores de lo esperado en diciembre, cuando preveían alcanzar los 50 millones de facturación, situándose de forma definitiva en 51,4 millones.
El grupo de restauración leonés, propietario de cadenas como Sibuya Urban Sushi Bar y Kamado Asian Food, registró el año pasado una facturación un 46,75% superior a la de 2021, cuando obtuvo 35 millones de euros.
Tras un año en el que abrió once nuevos restaurantes de Sibuya y otros dos de Kamado, el grupo afronta el 2023 con el objetivo de crecer con otros 20 nuevos establecimientos en zonas como Andalucía, Cataluña, el litoral mediterráneo y Baleares, además de iniciar su expansión internacional con sus primeras unidades en Portugal y Andorra.
Tal y como señalaba el director general de la compañía, Jesús Fernández, durante el estreno de su restaurante en el complejo Caleido de Madrid, el grupo de contempla para este año una expansión con 16 restaurantes de su marca enseña, Sibuya, y otras cuatro de Kamado Asian Food, "una marca con un potencial muy bueno de crecimiento con una propuesta de operativa más compleja y cuyo desarrollo ha sido más lento por haber nacido con dos años de retraso respecto a Sibuya".
Estas previsiones de crecimiento, que combinará la apertura tanto establecimientos propios como de unidades franquiciadas, permiten a la empresa fijarse un objetivo para este ejercicio de 75 millones de euros en facturación, lo que supondría nada menos que un incremento del 50% sobre los ingresos obtenidos en 2022.
A día de hoy, el grupo fundado en 2016 por Kima Fuentes y Rubén Fernández Labandera, cuenta con 48 restaurantes operativos de sus dos marcas y da trabajo a 698 personas tras ampliar su plantilla el año pasado un 32%.