El líder de Ciudadanos y candidato a la Presidencia del Gobierno, Albert Rivera, ha dado un mitin este domingo en de Rentería en un ambiente de gran tensión, rodeado por cientos de personas que rechazaban la presencia de la formación naranja en esta localidad guipuzcoana. Entre insultos y abucheos, les ha dicho: "Euskadi no es vuestro, es de todos los vascos y todos los españoles".
El mitin estaba previsto que se iniciara a las doce del mediodía y, momentos antes, los afiliados, además de los medios de comunicación, han llegado a la plaza con escolta policial. En los edificios de la plaza han colgado grandes lazos amarillos y también ikurriñas y esteladas.
Así nos ha recibido en Rentería el odio nacionalista a quienes defendemos la libertad y la democracia. Visto lo visto, volveremos pronto. ¡Ni un solo pueblo de España sin libertad!
— Albert Rivera (@Albert_Rivera) 14 de abril de 2019
¡Vamos! ????????#VamosPorLaLibertad ???????? pic.twitter.com/o1WZ1elPcS
Varios centenares de militantes, con banderas del partido, de España y de Europa, así como los medios de comunicación han sido ubicados en una zona vallada, donde se va a celebrar el mitin, y rodeándoles a unos 200 metros, se encontraban cientos de personas increpando a los congregados con continuos gritos reclamando "que se vayan" o "fascistas", entre otros insultos, que también llegaban desde las viviendas de la plaza, donde los vecinos hacían caceroladas. Los congregados también han coreado gritos a favor del acercamiento de presos. La Ertzainta ha cargado finalmente con porras y disparado salvas al aire contra las personas que protestaban.
"Frente a las cacerolas, diálogo"
Por su parte, intentando hacerse oír por encima de los gritos y de las cacerolas que algunos vecinos aporreaban sus balcones, Rivera ha reivindicado la libertad de reunión y de expresión, que "algunos quieren pisotear", ha dicho.
"Frente a las cacerolas, ideas; frente a los privilegios, igualdad; frente a los gritos, diálogo", ha afirmado, advirtiendo de que en Ciudadanos no van a dejar de ir a ningún pueblo de España y van a seguir "dando la batalla al nacionalismo".
Por ello, ha prometido que si su partido gobierna, impulsará una modificación de la Ley de Víctimas para que "se sancione a las personas y ayuntamientos que amparen homenajes a terroristas". Asimismo, ha apostado por cambiar la ley electoral para que los vascos que tuvieron que irse de Euskadi porque "el nacionalismo les echó" puedan votar en sus municipios de origen.