
Felipe VI llegó este miércoles a Bagdad, en el día que cumple 51 años y en un viaje no anunciado previamente por motivos de seguridad, para realizar una visita a las tropas españolas que participan en la misión de la OTAN que adiestra al Ejército iraquí en la lucha contra el Daesh.
El avión de la Fuerza Aérea Española en el que viajó el rey junto a la ministra de Defensa, Margarita Robles, aterrizó en la capital iraquí pasadas las 7:30 horas (4:30 GMT).
Fuentes de Zarzuela han informado de que el rey ha querido pasar la jornada de su aniversario con uno de los contingentes militares que España tiene desplegados en el extranjero cuando se cumplen treinta años del inicio de este tipo de misiones por parte de las fuerzas armadas españolas.
551 militares españoles
Irak, con 551 militares, es la segunda misión militar más numerosa que España tiene actualmente en el exterior, sólo por detrás de la desplegada en Líbano y que el rey visitó en abril de 2015.
Esa fue la primera visita que don Felipe realizó como jefe del Estado a un contingente español en el exterior, y la de este miércoles es la segunda.
La misión en territorio iraquí forma parte de la Operación "Inherent Resolve", la coalición internacional contra el yihadismo integrada por 60 países y liderada por Estados Unidos.
Visita al presidente iraquí
La agenda del monarca durante su estancia de algo menos de diez horas en Irak ha incluido una reunión en el Palacio Presidencial de Bagdad con el presidente del país, Barham Salim.
El propio Salih agradeció al Rey el trabajo que desarrollan las tropas españolas en este país asiático, en el encuentro que ambos mantuvieron en el marco del viaje de Felipe VI a la base 'Gran Capitán' de Besmayah.
Fuentas diplomáticas explicaron a los medios que están siguiendo este viaje, el primero del Rey a la base española de Besmayah, que el encuentro del Monarca con el presidente iraquí había sido "cordial" y que en él se realizó un análisis de la actual situación en la zona.
El Rey felicitó a Salih por la tarea de consolidación democrática en Irak, una zona en la que todavía hay grupúsculos del Daesh, sobre todo en el norte, que siguen siendo una amenaza.
En este contexto, Salih agradeció no sólo el trabajo que desde el año 2014 realizan las tropas españolas (más de 500 efectivos actualmente) formando a las fuerzas de seguridad de su país en la lucha contra el yihadismo, sino cómo lo hacen, alabando su gran profesionalidad.
Visita a la base de Besmayah
Asimismo, manifestó a don Felipe su compromiso con la integración de todas las etnias que conviven en la zona y su preocupación por el gran número de refugiados sirios, sobre todo niños, que demandan un futuro en paz y prosperidad. También se abordó el interés de varias empresas españolas por colaborar en el proceso de reconstrucción de este país asiático.
El presidente iraquí regaló al Rey un rosario musulmán típico de la zona, de piedra y plata, que confesó había elegido su esposa para ofrecérselo por su cumpleaños.
El Rey se encuentra ahora en la base de Besmayah, con uniforme de camuflaje árido, en la que departirá de nuevo con los militares destinados allí. La mayoría de ellos son hombres, ya que solo hay una treintena de mujeres en la misión española en Irak.
A las 17:00 horas, hora local, las 15:00 hora española, está previsto que don Felipe regrese a Madrid, aunque la visita lleva un cierto retraso.