
La Policía detuvo ayer por orden del juez del caso Tándem, Diego de Egea, al empresario Juan Muñoz, marido de la periodista Ana Rosa Quintana, por su relación con el excomisario José Manuel Villarejo, en prisión desde el pasado noviembre. Declarará ante el juez de la Audiencia Nacional encargado del caso, Diego de Egea, el jueves.
Según informaron a Efe fuentes de la investigación, Muñoz fue detenido en Madrid a instancias de la Fiscalía Anticorrupción por un encargo al excomisario, para investigar a una persona que les debía dinero.
El caso Tándem gira en torno a los trabajos que ha hecho Villarejo en las últimas décadas para clientes privados para los que obtenía información confidencial valiéndose de su condición policial y luego la vendía a cambio de millones de euros.
Precisamente ayer, el mismo juez de la Audiencia Nacional archivó la investigación contra cuatro directivos de un despacho de abogados que contrataron presuntamente los servicios del expolicía para hacer un informe de seguimiento de varios antiguos socios.
Esta pieza, denominada Iron, es una de las investigaciones abiertas contra el comisario jubilado, por lo que él y su abogado, Rafael Redondo, ambos en prisión provisional desde principios de noviembre de 2017, continúan imputados en la misma.
En los registros realizados en el domicilio de Villarejo el 3 de noviembre, los agentes descubrieron conversaciones del comisario grabadas donde quedaba demostrado que éste realizaba negocios privados ajenos a su función pública y por los que cobraba grandes cantidades de dinero.
En el caso de los hermanos Muñoz, el comisario Villarejo habría sido contratado para chantajear a un letrado para que sus clientes pagaran una deuda que tenían con ellos, recogía este martes La Vanguardia.
Para realizar el chantaje se habrían realizado seguimientos y utilizado métodos ilegales. Los investigadores quieren conocer si los clientes de Villarejo conocían estos métodos y si finalmente el chantaje se llevó a término.