
Ni es verdad que Mariano Rajoy ha hablado con Cristina Cifuentes para comunicarle, en concreto, que debe abandonar el cargo, ni tampoco es cierto que el presidente haya dado todo por perdido en la Comunidad de Madrid.
Así lo confirmaron el viernes fuentes de Moncloa, y así lo refrendó el propio presidente del Gobierno, decidido a frenar por el instante la salida de la presidenta madrileña y, de trasladar toda la presión sobre Albert Rivera, con el objeto de ver si es capaz de seguir con esta táctica y que Ciudadanos apoye la moción de censura del Partido Socialista, uniéndose al mismo propósito que Podemos.
A la vista de los últimos datos, apunta Rajoy -es decir, de los currículum falsos de dirigentes de otras fuerzas políticas, entre ellos José Manuel Franco (PSM), Toni Cantó (C's), Miguel Ángel Gutiérrez (C's), Juan Merlo (Podemos)-, no estaría de más aplicarse el refrán que reza consejos vendo que para mí no tengo.
La coherencia de C's
Dicho de otro modo, explicó el presidente Rajoy, no se puede criticar algo cuando lo que vemos de los demás es peor. Por eso, razonó el líder de los populares, lo lógico es pedir coherencia y congruencia entre las declaraciones y los hechos, enviando un claro mensaje a Albert Rivera, su principal socio de investidura en el Gobierno de España y en la Comunidad de Madrid.
Para Rajoy, el caso del máster de la URJC de Cristina Cifuentes no es suficiente motivo como para romper un acuerdo de legislatura. Eso hace que no entienda a la formación naranja, porque, a su modo de ver, la presidenta de Madrid ha dado sus explicaciones a los medios y a la Asamblea, así que toca esperar.
Esperar es la fórmula que también aconseja el portavoz del Gobierno desde el Palacio de La Moncloa. Íñigo Méndez de Vigo pide paciencia para conocer el resultados de las investigaciones judiciales y de la URJC, y que las cosas sigan su curso, porque lo que se juega es el tema de la estabilidad de la Comunidad de Madrid.
Hay un acuerdo, sostiene el portavoz, "y hasta ahora no se ha demostrado nada. Seamos serios -subrayó-, y apliquemos igualdad de tratamiento a todos los casos. Porque da la sensación de que algunos se rasgan las vestiduras con las cosas de lo demás, y disculpan otros temas cuando se trata solo de ellos", apostilló.
En el capítulo de titulaciones, Pablo Casado, vicesecretario de Co-municación del PP, explica a elEconomista que su título en Harvard no es más de lo que aparece en su CV, donde describe que completó sus formación académica con una serie de programas. Fue con motivo del curso en el Real Colegio de Harvard cuando viajó a Boston, EEUU.