
Carlos Carrizosa, número dos de la lista de Ciudadanos (Cs) por Barcelona, conoce muy bien la compleja legislatura que ha dejado atrás Cataluña como exportavoz de su partido en el Parlament. Carrizosa cree que las elecciones del 21D son una oportunidad para arrebatar la mayoría a los independentistas y para evitar que se repita el desafío secesionista, que ha sumido la economía catalana en una etapa de inestabilidad. Para el candidato, ahora que ERC ha recuperado la ruptura "unilateral" como propuesta electoral se evidencia que la única oferta de los independentistas para Cataluña es romper con España.
Las encuestas electorales cada vez otorgan a Cs mejores resultados...
Lo más importante es que la mayor parte de ellas nos convierten en uno de los partidos con opción a ganar... y también en votos. Además, apuntan que los independentistas pueden perder las elecciones el 21D.
A pesar de esa ventaja, el PSC y Catalunya en Comú son reticentes a pactar con ustedes. ¿Confían en que apoyen finalmente una posible investidura de Inés Arrimadas?
Se han publicado encuestas que señalan que el 60% de los votantes socialistas desea que se pacte con Inés Arrimadas. A los socialistas hay que pedirles que digan a sus electores qué van a hacer con su voto: si van a apoyar el procés con otro tripartito con una ERC que ya señala que volverá a la vía unilateral. Por lo tanto, creo que, pese a las reticencias y la poca claridad mostradas hasta ahora por Miquel Iceta, no tendrá otra alternativa razonable que darle apoyo a Inés Arrimadas. En cuento a Podemos, deberá decidir si se abstiene para facilitar un gobierno de cambio, o si prefiere seguir con unos partidos que están diciendo que nos llevarían otra vez a la vía unilateral.
¿Cree que el giro de ERC hacia la unilateralidad se debe a la dependencia que tienen de la CUP?
Los partidos independentistas, forzosamente, necesitan a la CUP. No hay ninguna encuesta que dé mayoría por sí sola a ERC o a JuntsXCat. Por lo tanto, no cabe la menor duda de que si ganan los independentistas, arrastrados por la CUP, vamos a tener más de lo mismo. Y esto es más inestabilidad, porque la CUP no es un partido que forme parte de un sistema basado en el capitalismo productivo. La falta de respeto a las leyes es justo lo que ha provocado la inestabilidad y la fuga de 3.000 empresas.
¿Les consta que existen inversiones paradas por esa inestabilidad?
La falta de inversores extranjeros ha provocado un estancamiento inmediato de los precios de los inmuebles y la publicidad que ha dado el anterior gobierno de la Generalitat ha ahuyentado a los inversores. La red de embajadas de Romeva, y los frecuentes viajes de Puigdemont al extranjero, no han servido para obtener apoyos para el independentismo, pero sí para extender la sensación de conflicto.
La campaña de Puigdemont en Bruselas, ¿está perjudicando?
Perjudica a la imagen de España y las inversiones el que haya un señor que está diciendo que someterá a referéndum la pertenencia a la Unión Europea, a la que considera un "club de caducos". Cuando hay dirigentes que son capaces de declarar la independencia y huir a un país extranjero y otros están en prisión, es inocultable que estamos viviendo un problema entre administraciones; que hay un conflicto de verdad. Como todo el mundo sabe, el dinero es miedoso y huye de los conflictos y más en un mundo global donde existen tantas oportunidades. Lo que han hecho el señor Puigdemont y el señor Junqueras ha sido empobrecernos a todos, y por eso es necesario que se forme un Gobierno en Cataluña que aporte sensación de estabilidad y que apueste por un marco de estabilidad. Si nosotros gobernamos, lo que pretendemos es demostrar que tenemos un marco jurídico estable que propicie el retorno de empresas, o, al menos, pare la hemorragia.
En su programa contemplan un plan de choque para frenar la fuga de empresas, ¿en qué consiste?
En Cataluña, la parte autonómica del IRPF es la más alta de España. Una de las medidas que fomentaría el regreso de empresas, porque afecta a la competitividad, es una revisión de este impuesto. Nosotros planteamos rebajas para la franja que va desde los 14.000 a los 30.000 euros. Un 70% de los contribuyentes se encuentra en esa banda. Si se baja la retención, las empresas pueden ofrecer mejor salario neto, con un menor coste para las compañías. También queremos reducir la burocracia para las empresas que quieran instalarse en Cataluña. Ahora mismo ocupamos el puesto 175 de 250 en las facilidades que da la administración para la creación de empresas. Hay que crear una ventanilla única para facilitar los trámites en la creación de nuevos negocios, que también están cayendo de forma importante.
¿Es recuperable la marca Barcelona tras todo lo que ha pasado?
Ha quedado muy dañada y la alcaldesa, Ada Colau, no ha ayudado nada. Ha tenido en el punto de mira el turismo y los grandes eventos, como el Mobile World Congress. Tampoco prestó suficiente ayuda a la candidatura de la ciudad a la Agencia Europea del Medicamento.