
Las encuestas electorales siguen sin dar tregua a un partido socialdemócrata (SPD) que aparece con doce puntos menos, en segunda posición, por detrás de Angela Merkel. A pesar de que a un mes de la cita electoral del 24 de septiembre los de Martin Schulz no parecen tener mucha oportunidad de poder disputar la cancillería. pues el candidato socialdemócrata ha declarado en la cadena ZDF que se ve canciller. Y sigue insistiendo en que no quiere una Gran Coalición como la actual, en la que su partido es el socio menor de la CDU de Merkel, pero que no tendría inconveniente en formar parte de ella si ésta se produjese capitaneada por el SPD.
Martin Schulz, en su línea de la defensa de los derechos sociales (leitmotiv de su campaña), afirmó que "reelegir a Merkel sería votar de nuevo por el continuismo" y reconoció la buena marcha económica de Alemania. A pesar de las buenas cifras, el socialdemócrata declara que "hay gente a la que le va muy bien, pero Alemania es un país muy dividido", en referencia a la desigualdad social que denuncian que existe.
La lucha por el primer puesto, salvo novedad de última hora, será fácil para Angela Merkel, que a tenor de los sondeos no deberá invertir muchos esfuerzos en la campaña electoral para superar a su rival Martin Schulz. Las seis semanas de campaña electoral ya han comenzado, aunque el pasado viernes sufrieron un pequeño parón, ya que ambos líderes acordaron limitar su campaña electoral por respeto a las víctimas de los atentados de Barcelona, entre los que se han contabilizado tres víctimas de procedencia germana. Schulz declaró haber hablado por teléfono con la canciller Merkel "para renunciar a la música y limitar nuestros actos de campaña de hoy en solidaridad con el pueblo español".
Futuros pactos
Por otro lado, las estadísticas reflejan que el Partido Liberal (FdP) no consigue despegar y ronda el 9% en intención de voto. Este dato es importante porque es un partido con el que CDU preferiría pactar para dejar fuera del gobierno al SPD si los liberales obtuviesen un buen resultado. Ya ocurrió así tras las elecciones de este año en Renania del Norte-Westfalia (el Land de Martin Schulz), donde al sumar a los liberales destronaron al Partido Socialdemócrata en la región más poblada y uno de sus principales feudos. En torno al diez por ciento también fluctúan Die Linke (izquierda radical) y la ultraderechista AfD. Esta nueva extrema derecha aprovecha cada atentado para arremeter contra Merkel y así lo hicieron el pasado viernes, al utilizar el desgraciado ataque para hacer campaña electoral. En sus redes sociales colgaron carteles en los que se podían leer las teóricas declaraciones que haría Merkel tras los atentados de Barcelona, en las que ponía explícitamente que "estos ataques no tienen nada que ver con el Islam", para después añadir que se deben cerrar las fronteras.
En este sentido, a finales de la semana pasada Merkel también fue abucheada por un grupo de ultras simpatizantes del movimiento islamófobo PEGIDA (Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente) en un mitin celebrado en Annaberg-Buchholz, en el estado federado de Sajonia, donde se originaron estos movimientos racistas y ultraderechistas.
En estas elecciones están llamadas a participar más de 62 millones de personas mayores de 18 años. Tras ofrecerse los resultados el mismo día de las votaciones, se establecerá un plazo máximo de un mes en el que el nuevo Parlamento que salga elegido se reunirá y comenzará el trabajo de intentar formar alguna coalición. Más tarde, se producirá una votación (secreta) para designar canciller. En esta ocasión competirán 42 partidos, que deberán superar el 5% de votos para poder obtener escaños en el Bundestag o Parlamento alemán. Angela Merkel abrió la semana pasada su campaña apelando al déficit cero y el pleno empleo, dos de sus principales propuestas electorales. Muy optimista, la democristiana aseguró que "en 2025 podremos llegar a una tasa de desempleo inferior al 3%. Queremos llegar a esa fecha sin deudas para las nuevas generaciones". También, defendió a ultranza el proyecto europeo, al igual que suele hacer Martin Schulz en sus apariciones, aunque a veces se muestra algo crítico con el mismo. Para Merkel, la Unión Europea es "garante de paz" y aseveró que su buen funcionamiento lo es también para Alemania. El último de los seis partidos que presumiblemente colorearán el nuevo Bundestag son los Verdes. Los ecologistas no están en su mejor momento y, pese a gobernar en una de las regiones más acaudaladas, Baden-Württemberg, junto con el CDU, son los más perjudicados en las encuestas, con un 7%, cifra que llega a mínimos peligrosos.