La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha hecho este miércoles una traducción ligera sobre a qué se refiere Pedro Sánchez con los altos cargos en instituciones que ayer ofreció a Unidas Podemos a cambio de su apoyo en una nueva investidura y de la garantía de estabilidad pero que juega con el matiz entre controly participación en los mismos.
En una entrevista en Cadena Ser Calvo ha dado por buenos que órganos como la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Defensor del Pueblo o el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), enunciadas durante una pregunta, puedan estar entre esas altas instituciones en las que Unidas Podemos se situaría al frente si aceptan el programa presentado por el PSOE. "Podrían estar al frente también de órganos en los que tenemos [el PSOE] una proporción muy importante y donde por cuota quizá ellos no tuvieran que estar". Estructuras en las que ha dicho que "se hace a veces un trabajo muy interesante y muy determinante" pero que están fuera del Consejo de Ministros.
Para explicar la propuesta, Calvo se ha retrotraído 10 meses atrás para insistir en que el acuerdo puede volver a darse. "Esto ya lo hemos hecho. En el Consejo de Seguridad Nuclear no tenían cuota para estar y la ofrecimos, en el Consejo de Estado tampoco y también se la ofrecimos... Hemos hecho 10 meses muy positivos y me niego a pensar que lo que hemos hecho estos 10 meses, poniendo soluciones a muchos problemas y en el que las urnas han dado una victoria a la izquierda española, que no ha funcionado y que no es positivo", ha indicado.
También ha recordado que ambas formaciones acordaron unos Presupuestos que no salieron adelante por los votos de la derecha y los independentistas pero que sirven para saber que "hay antecedentes de acuerdo".
Calvo considera que la propuesta es razonable. "Con sus 42 escaños no nos dan las cifras ni para la investidura. Aún así estamos dispuestos a sacar esto adelante con el mejor ánimo posible", ha insistido.
De todos modos, la vicepresidenta insiste en que primero hay que hablar de programa y dejar los puestos para después: "Si no estamos de acuerdo en un programa es muy difícil repartir responsabilidades", ha dicho un día antes de que los equipos negociadores de PSOE y Podemos que lideran ella misma y Pablo Echenique vuelvan a verse tras un verano de silencio.
Ábalos añade el matiz de la participación
Poco después de la intervención de Calvo, ha sido José Luis Ábalos el encargado de matizar las palabras de la vicepresidenta. Según las declaraciones del secretario de Organización del PSOE y ministro de Fomento en funciones, el equipo de Pablo Iglesias participaría en órganos institucionales pero no los controlaría: "Una cosa es la representación o participación, y otra el control", ha apuntado sobre las palabras de Calvo.
El matiz lo ha llevado, en una entrevista en Onda Cero, hacia el terreno de las empresas públicas: "No hemos planteado si entran en el paquete, eso no es estrictamente representación institucional, son entidades de gestión", ha indicado en referencia a RTVE, el Consejo Superior de Deportes o Correos.
Sí ha aclarado Ábalos en un mensaje directo a Iglesias que "si realmente fundamentan el gobierno de coalición en la desconfianza y las garantías, nosotros pretendemos atajar esto ofreciendo niveles de representación institucional".
Unidas Podemos no aceptará pasos atrás
Sea como fuere, parece que la propuesta sigue siendo insuficiente para Unidas Podemos. Yolanda Díaz, nuevo componente del equipo negociador de la coalición morada, ha insistido en la necesidad de que su formación entre en el Gobierno, quitando valor a la oferta de Calvo.
Considera un "paso atrás" que se les ofrezca puestos de alta responsabilidad según ellos deberían estar en manos de profesionales y no de políticos, como ha solicitado en más de una ocasión.